La huelga de Panrico obliga a los jefes de la planta a hornear el pan de molde
SANTIAGO
El conflicto laboral obliga a la jerarquía a implicarse en la producción para atender los pedidos La plantilla anuncia paros de 24 horas de tres días consecutivos las próximas semanas
16 mar 2006 . Actualizado a las 06:00 h.Buena parte de la jerarquía de la fábrica de Panrico del polígono del Tambre se vio obligada ayer a meterse de lleno en el proceso de producción y a asumir personalmente el horneado del pan de molde ante el paro protagonizado por los trabajadores de la planta. Los más de cien empleados de la compañía en Santiago llevan semanas protestando para reclamar que sus condiciones salariales se equiparen con las del resto de España, ya que en la actualidad cobran menos por realizar el mismo trabajo. Para apoyar sus reivindicaciones, ayer cortaron el tráfico en la entrada al polígono del Tambre y también cesaron su actividad durante dos horas, entre las nueve y las once de la mañana. El problema es que los sucesivos paros laborales han reducido la producción en los últimos días, de forma que los jefes de la planta se vieron obligados a ponerse manos a la obra para garantizar que los pedidos se podrían entregar a tiempo. Entre ellos, los responsables del control de calidad o los jefes de línea, habitualmente presentes durante el proceso de fabricación; pero también metieron las manos en la masa otros directivos menos habituados, como el propio director de personal. «Ayer sí que se metieron en faena», cuenta Alfonso Saavedra, portavoz del comité de huelga de Panrico. Según explica, los días anteriores se había podido salir del paso porque se había adelantado trabajo, situación que ayer llegó a su límite. Los jefes se limitaron a hornear el pan de molde, con un ritmo de producción más bajo pero con los mismos controles de calidad que el resto de los días. Quizás porque lo sucedido ayer fue la gota que colmó el vaso, la dirección de la empresa ha anunciado su intención de convocar hoy a los trabajadores a una reunión que debía haberse celebrado ayer, pero que se suspendió por razones ajenas a la negociación. Mientras tanto, la plantilla ha anunciado su intención de endurecer las protestas y ha convocado paros de 24 horas que colapsarán la producción para los días 27, 28 y 29 de marzo y 3, 4 y 5 de abril, mientras que los paros parciales convocados anteriormente se han anulado.