Castaño destaca la relación que unió a Cela y María Zambrano

Uxía López Rodríguez
Uxía López PADRÓN

SANTIAGO

ANXO ABALO

La fundación de Iria-Flavia dedica una exposición a la pensadora La sede padronesa muestra los manuscritos de los primeros poemas del Nobel gallego

04 mar 2004 . Actualizado a las 06:00 h.

La Fundación Camilo José Cela de Padrón dedica su primera exposición del año a la pensadora malagueña María Zambrano, coincidiendo con el centenario de su nacimiento. La muestra fue inaugurada ayer por la propia presidenta Marina Castaño, que recordó la importancia de los fondos de la entidad cultural para «recuperar un período extenso e importante» de la reciente Historia española. La Fundación aprovechó el acto para entregar los premios del concurso de transcripción, redacción y caligrafía que convocó para difundir el conocimiento de la obra celiana y fomentar la lectura. Previamente a la apertura en sí de la muestra, el profesor de la Universidad de Santiago Nel Rodríguez habló de María Zambrano o el perfume de la razón, ante un numeroso y atento auditorio. La exposición, titulada Diálogo romántico con María Zambrano , muestra hasta el 30 de abril la correspondencia que mantuvieron entre 1935 y 1984 el autor padronés y la pensadora malagueña, y en ella se aportan numerosos datos, tanto sobre la vida y la obra de sus autores como referencias sobre personajes de la talla de Miguel Hernández, Max Aub, Américo Castro y Emilio Prados, entre otros. También se pueden comtemplar en esta muestra los manuscritos de los primeros poemas de Camilo José Cela, que dio a conocer a Zambrano, la «persona que le tendió la mano en sus inicios literarios». De hecho, la filósofa intercedía por él en su tertulia de los domingos y lo hacía ante intelectuales y escritores de renombre. Junto con los manuscritos, se pueden contemplar en Padrón las colaboraciones de Zambrano en Papeles de Son Armadans , así como otras revistas en las que colaboró antes de exiliarse, tales como Hora de España, Revista de Occidente y Cruz y Raya . Las cartas que se exponen forman parte del gran epistolario guardado por Cela en vida y ahora conservado por la fundación padronesa que lleva su nombre y que se compone de más de 72.000 misivas de 9.000 autores distintos.