Jóvenes emprendedores presentaron sus proyectos en un foro patrocinado por Radio Voz Unirisco, el vivero tecnológico de la USC, ha financiado más de 50 ideas en los últimos siete años
26 ene 2004 . Actualizado a las 06:00 h.Sacar adelante un proyecto empresarial de carácter innovador no es tarea fácil, ya que, además de contar con una buena idea, es preciso realizar una buena gestión que permita salvar los obstáculos propios de este tipo de iniciativas. Por esta razón, los expertos recomiendan a los emprendedores, en muchos casos procedentes de titulaciones técnicas o científicas, que deleguen la gestión en profesionales con conocimientos y experiencia en administración de empresas. Así lo indicó Javier López Martínez, director de Unirisco, la sociedad de capital riesgo de la USC, en un foro que tuvo lugar en la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales con el patrocinio de esta institución, la Cámara de Comercio de Santiago y Unirisco y que fue transmitido en directo por Radio Voz. En una conferencia pronunciada antes de que se iniciara el debate, Javier López afirmó que los empresarios deben tomar conciencia de la importancia de contar con «personal comercial adecuado» para dotar de consistencia a sus proyectos. Posteriormente, se sumaron al foro Filomena Casal, secretaria general de la Cámara de Comercio, y tres jóvenes empresarios surgidos del vivero de empresas innovadoras de Unirisco. Todos ellos incidieron en la necesidad de contar con un mayor público para sacar adelante sus proyectos, dadas las dificultades existentes. Ejemplos de éxito Sin embargo, los tres emprendedores representan la cara amable de la iniciativa más arriesgada, ya que sus proyectos han cuajado en empresas reales que gozan de buena salud. Es el caso de Helionova, dedicada a la ingeniería medioambiental y a la gestión de energías renovables; o de Signo, una firma que centra sus actividades en la cartografía elaborada a partir de herramientas informáticas. También estuvo presente uno de los fundadores de Galchimia, que se dedica a producir elementos químicos a medida para laboratorios farmacéuticos y organismos de investigación. Estos son sólo tres ejemplos de las más de 50 empresas de base tecnológica surgidas desde 1998 de la iniciativa de Unirisco, de las que una docena tienen una base esencialmente tecnológica. Sin embargo, Javier López explicó que muchas de las empresas que reciben financiación son innovadoras, pero no desde el punto de vista tecnológico sino por la introducción de procedimientos novedosos. De hecho, sólo el 5% de los proyectos avalados son tecnológicos.