Los vecinos de Teo rinden un cálido homenaje al escultorManuelMallo

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El artista, al recibir el diploma de hijo predilecto, dijo «no tener méritos para este galardón» Desde hace 25 años trabaja en la construcción de la Sagrada Familia con los planos de Gaudí

27 sep 2003 . Actualizado a las 07:00 h.

?l escultor Manuel Mallo Mallo ya es oficialmente hijo predilecto del municipio que le vio nacer hace 81 años. Durante la mañana de ayer, en el centro sociocultural de A Ramallosa, el artista acompañado de su mujer, Elvira Paradela Hortas (nacida en Calo), y sus tres hijas, Carmen, Isabel y Lourdes, vivió una de las jornadas más emotivas de su vida. Al recibir el diploma que le acredita como hijo predilecto de Teo, Mallo dijo no ser merecedor del homenaje: «Por más vuelta que le doy no encontre méritos para recibir este homenaje; cualquier vecino de Teo se lo merece», señaló. El encargado de realizar la semblanza del artista, a petición del propio Mallo, fue Víctor Vazquéz Portomeñe. En su discurso, el senador recordó las enormes dificultades que tuvo que superar Manuel Mallo tanto en su infancia como en su adolescencia. Destacó su inteligencia y «gran interés y tenacidad para aprender, lo que llevó a su abuela materna a realizar enormes sacrificios para instruirlo». Portomeñe recordó que Manuel Mallo trabaja, desde hace 25 años, «de forma casi exclusiva, en la construcción del tempo inacabado de la Sagrada Familia» en Barcelona. Tanto al principio como al final del acto de homenaje se proyectaron sendos vídeos sobre la vida y obra del artista gallego. Los asistentes, algo más de un centenar, participaron al final del acto en el descubrimiento de un monolito en el parque de A Ramallosa, situado frente al centro social, que recuerda la jornada vivida durante la mañana de ayer. El escultor natural de Cacheiras posee, entre otras distinciones, la medalla Castelao 2003; la del mérito en el trabajo, concedida el 18 de septiembre del 2002; y la de bronce de Galicia 2001. Asimismo, Manuel Mallo fue nombrado lucense del año en 1988 y este mismo año recibió la medalla de oro del Centro Cultural Rosalía de Castro.