Marina Castaño aseguró que el proyecto para desviar el tráfico de la N-550 está en marcha La variante que sacará el tráfico del casco histórico de Iria-Flavia, en Padrón, podría ser una realidad en tres o cuatro años. Con esta actuación el actual tramo de la carretera nacional 550 se convertiría en una calle «empedrada y adoquinada». Ésta es, al menos , la información desvelada por la presidenta de la Fundación Camilo José Cela, Marina Castaño, quien confirmó que el proyecto «está en marcha» para convertir las inmediaciones de la institución cultural en un «sitio cómodo» para residentes y visitantes.
10 jul 2002 . Actualizado a las 07:00 h.Este es, quizás, uno de los proyectos pendientes de la Fundación Cela ya que el paso de una carretera de carácter nacional por su frente desluce la institución y, sobre todo, entorpece su actividad. El propio escritor padronés llegó a hablar de la necesidad de construir una variante para desviar el tráfico rodado de Iria-Flavia y convertir la zona en una calle adoquinada, con tráfico restringido. Recientemente, el Ministerio de Fomento adjudicó en el plazo de doce meses el estudio informativo para analizar y comparar las distintas alternativas viables para la construcción de la variante. En principio, se habló de que el desvío partiría en Iria a la altura de un viejo aserradero y concluiría en la zona de la antigua azucarera, aunque no fue confirmado ni tan siquiera por fuentes municipales. En cualquier caso, Marina Castaño expresó su deseo de que la variante de la carretera se construya cuanto antes.