Ante Japón, examen para España sin Busquets

QATAR 2022

ALBERT GEA | REUTERS

Luis Enrique medita si prescindir del capitán, apercibido, para garantizar su concurso en octavos de final y apostar por Rodri como pivote ante los nipones

29 nov 2022 . Actualizado a las 08:55 h.

Mientras en Barcelona siguen a vueltas con la especulación que sitúa a Sergio Busquets la próxima temporada en el Inter de Miami de la MLS, Luis Enrique volvía a prestarle cátedra tras el empate contra Alemania: «Tenemos la tendencia de cansarnos de los jugadores veteranos, como Busquets, pero no lo traigo aquí para pasar el rato. Llevan intentado retirar a Busi no sé cuántos años». Sergio cumplió en julio 34. El asturiano ya encumbró al capitán de la selección tras ofrecer la convocatoria para Catar. «Si conseguimos que el escenario del partido sea el de jugar en campo contrario y que las posiciones de presión sean cortas, Busquets es como Rafa Nadal, el mejor del mundo, pero si el equipo es largo y se rompe, no. No veo un centrocampista mejor que él».

El dilema para Luis Enrique, en el decisivo partido de la fase de grupos ante Japón (jueves, 20.00 horas, La 1), es el riesgo que quiera asumir con Busquets tras ver la cartulina amarilla ante Alemania. Al filo del descanso, Sergio derribó a Musiala, que había controlado un balón endiablado y se había marchado de Rodri. Makkelie lo amonestó. Una tarjeta que tiene precio. Si Busquets viese otra ante Japón, se perdería el hipotético cruce de octavos de final.

Se limpiarán en cuartos

A Luis Enrique le cuestionaron por ese condicionante, a la hora de introducir cambios: «Todavía no tengo claro lo que voy a hacer». La puerta quedó entreabierta. Las tarjetas no se limpiarán hasta la eliminatoria de cuartos de final, con lo que Busquets tendría que convivir durante dos partidos con ese riesgo. Por ello, la opción de que Rodri adelante su posición ante Japón para darle descanso al capitán se dispara en los pronósticos. Con ese movimiento, Pau Torres o Eric García debutarían en el Mundial como pareja de Laporte en el eje de la defensa. La opción de Guillamón se presenta mucho más remota. En algunas cuentas ya entraba que alguno de los centrales naturales se pudiera estrenar frente a Alemania. El seleccionador volvió a preferir a un pivote como Rodri reconvertido.

Luis Enrique ya había confesado, antes de arrancar el periplo mundialista, su intención de dosificar a Busi. Sergio fue, junto a Pedri y Unai Simón, el único que no jugó ni un minuto en Amán, ante Jordania, en el último amistoso, sin contar a los futbolistas que venían con molestias físicas.

Dos precedentes próximos

El preparador ya oxigenó a Busquets en junio, cuando España afrontó cuatro partidos de la Liga de Naciones en el espacio de diez días. Sergio jugó íntegro el primero contra Portugal (1-1), salió desde el banquillo la última media hora en la visita a la República Checa (2-2), disputó todos los minutos en la victoria en Suiza (0-1) y volvió a descansar en la visita de los checos a La Rosaleda (2-0), en la que participó los últimos 11 minutos. Luis Enrique le dio en ambos compromisos ante los checos la plaza de Busquets a Rodri, junto a Koke y Gavi en la ida y con el propio Koke y Carles Soler en la vuelta. Pedri estuvo ausente de esa ventana por lesión.

«No estoy de acuerdo en que vaya a ser el último Mundial de Busi, mi objetivo es convencerlo para que participe en uno más porque seguro que el juego mejorará», insistió Luis Enrique, tras el empate con Alemania, en la relevancia que le otorga al pivote. Le toca ahora decidir cómo lo gestiona frente a Japón.