Sanxenxo aplicará las últimas medidas de choque para salvar el abeto del pazo de Quintáns
SANXENXO
El árbol sufrió un fuerte ataque por un hongo, pero las pruebas de resistencia de la madera dan pie a intentar evitar su tala
16 may 2022 . Actualizado a las 19:28 h.El Concello de Sanxenxo quiere agotar todas las vías posibles para salvar el magnífico ejemplar de abeto blanco del pazo de Quintáns, en Noalla. El árbol se encuentra en un estado «precario» como consecuencia de un hongo y el Ayuntamiento aplicará unas últimas medidas de choque para impedir su tala.
El gobierno local lleva meses siguiendo las recomendaciones de la Estación Fitopatológica de O Areeiro, cuyos técnicos realizan un seguimiento al árbol. En su último informe, el ejecutivo sanxenxino quiso saber la situación actual del ejemplar y si procedía algún otro tipo de tratamiento, ya que si fuese posible salvarlo podría optar al Catálogo Galego de Árbores Senlleiras.
Este informe de O Areeiro precisa que este abeto presenta una «sensible degradación da madeira na parte alta do tronco, con buracos e áreas máis ou menos grandes con falta de madeira» respecto al análisis realizado en el 2019. Se incide en que «a situación da árbore é precaria e, de non ser pola súa estrana e peculiar arquitectura, e polo lugar onde medra, a recomendación de actuación sería proceder xa a súa retirada».
Sin embargo, desde el Concello puntualizaron que las pruebas de resistencia de la madera del tronco resultaron positivas y que en las muestras tomadas del suelo ya no se detectaron los patógenos que propiciaron el tratamiento inicial. De esta forma, el Ayuntamiento acometerá in extremis las recomendaciones del informe, que consisten en biselar y sanear los cortes horizontales y las zonas de madera más degradadas, aplicando una pasta fungicida. También se cauterizarán con calor las zonas de madera más degradada y se podarán algunas ramas.
Después de esta intervención ambiental de urgencia, en caso de que el árbol no lograse recuperarse, el informe de O Areeiro recomienda eliminar la totalidad de la copa para evitar daños por la caída de ramas secas.