Día de estreno para alumnos y profesores en el colegio nuevo de Vilalonga
11 sep 2021 . Actualizado a las 21:48 h.El comienzo del curso escolar en Vilalonga, en Sanxenxo, fue ayer de estreno. No solo se empezaba una nueva temporada docente, sino que las aulas y pasillos del nuevo colegio, situado en O Revel, se llenaron por primera vez de las voces infantiles y de las explicaciones de los profesores. Vilalonga, después de años y años de espera, pudo por fin estrenar colegio y lo hizo por todo lo grande. Ni la pandemia ni la lluvia que amenazaba con caer a cántaros a la entrada de los escolares pudieron empañar la jornada.
Los alumnos fueron convocados por turnos y clases, de una forma escalonada a lo largo de tres cuartos de hora. Los profesores esperaban con las listas en el porche de entrada, mientras que los padres acompañaron a sus hijos en esta primera jornada, dedicada más bien a las presentaciones de los docentes y a los reencuentros de los amigos en clase.
El director, José Ricardo Rodríguez, explicó que se había ganado mucho con respecto al viejo Cruceiro. «Gañamos todos, o alumnado pode desprazarse polo interior de todo o colexio, cando antes os de infantil tiñan que saír ao exterior e no inverno, se chovía se mollaban», indicó.
Once aulas y divisiones móviles
Para tenerlo a tiempo hubo que dar un último acelerón en los días anteriores a su inauguración. «Tivemos moito traballo, porque houbo que subir todo o que tiñamos no colexio vello», apunta. El resultado está a la vista. Ahora los profesores y alumnos disponen de un centro que se divide en dos grandes áreas -de Infantil y de Primaria- distribuidas en once aulas, con biblioteca, comedor, gimnasio y divisiones móviles en las clases que permiten desdoblarlas cuando sea necesario.
Otra novedad es el aparcamiento. Hay un buen número de plazas en el entorno. Algunos de los padres a la entrada sugerían que podrían ser algunas más, pero hay quien recordó que en el anterior recinto era imposible disponer ni de un tercio de las actuales.
El nuevo Cruceiro tiene una matrícula de 211 niños -el último se apuntó justamente ayer, explicó el director-, una cifra muy semejante a la del curso pasado. El claustro lo forman 19 docentes.
«Este colexio é mellor, comparado co vello é mellor en todo, sen comparación», apuntó uno de los padres que ayer se acercó a dejar a su hijo en el centro y, de paso, volver a acompañarlo al interior. El centro se inauguró el martes con una visita de Núñez Fejioo. Esa tarde, hubo una jornada de puertas abiertas a la que asistieron más de 600 personas.
«Es un colegio muy bonito y muy grande, el viejo no tiene punto de comparación, aunque para mi las aulas son pequeñas». «Eu a única pega que lle poño son as cadeiras, que son de plástico e poden romper», afirmaron dos madres. Eso sí, la impresión general entre padres y docentes es buena. «Este é un colexio que todos esperábamos con moitas gañas, amplo, espazoso e con moita ventilación», concluyó el director.