Procesión exprés en Sanxenxo por la virgen de Carmen

La Voz

SANXENXO

CAPOTILLO

La pandemia condicionó las celebraciones de la patrona de los marineros, cuya imagen salió al mar a bordo del Playa de Sanxenxo

06 sep 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Las fiestas del verano tuvieron ayer su punto y final en Sanxenxo en el año del covid, con la celebración de la virgen del Carmen, patrona de las gentes del mar. Como dictaba la prudencia y siguiendo las instrucciones de las autoridades sanitarias, no hubo grandes actividades, ni litúrgicas, ni profanas. Procesiones por el medio de la capital turística, conciertos y verbenas quedan para el 2021 si las condiciones sanitarias lo permiten. Este septiembre, mejor ser comedidos.

No hubo comitiva por el casco urbano, pero sí procesión marítima. La penúltima de las que se celebran todos los años en la ría de Pontevedra -está por ver qué pasa con la de Portonovo en otoño-. En Sanxenxo ayer una furgoneta trasladó la imagen de la virgen, en una ceremonia rápida, sin andas ni costaleros, ni cirios ni feligreses detrás de la imagen, como forma más eficaz de evitar reunir gente.

Así que en el puerto, esperaba un grupo pequeño de personas, que se ocupó de subir a la virgen del Carmen a bordo del Playa de Sanxenxo, la embarcación pesquera que todos los años la lleva. En esto sí se respetó la tradición. También subió al barco el párroco, que presidía la faceta religiosa de la festividad.

El sol lució toda la jornada de ayer y al mediodía en el recinto portuario y el espigón había bastantes personas paseando, que se apresuraron a hacer fotos y grabar la comitiva. Cuando el playa de Sanxenxo se hizo a la mar, le siguieron entre quince y veinte embarcaciones. Ya en medio de la ría, el párroco rezó y responso y se lanzaron las ofrendas al agua. Una vez finalizado todo, los barcos regresaron al puerto sanxenxino, con la esperanza de que el próximo año el covid esté bajo control y todo vuelva a festejarse como siempre.