La ausencia de los humanos de la playa por el confinamiento animó a anidar a una pareja de estos pájaros protegidos
11 may 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Hay que remontarse al 2014 para encontrar un nido de chorlitejo patinegro (Charadrius alexandrinus) en la playa de Montalvo, en Sanxenxo. Hasta ahora. La ausencia de humanos en la playa por el confinamiento del estado de alarma durante la mayor parte de marzo hasta el principio de mayo ha animado a una pareja de estos pájaros protegidos a intentarlo nuevamente esta primavera. Lo confirma Gustavo Ferreiro, representante de la Sociedad Española de Ornitología (SEO / Birdlife) en la provincia.
Ahora que Sanxenxo entra en la fase uno de la desescalada y se permitirán más actividades que antes, Ferreiro recordó la importancia de respetar el ámbito dunar de Montalvo y no dejar a los perros entrar en la duna. Son precisamente los cánidos sueltos una de las razones por la que fracasan las puestas de este pájaro. Los adultos, asustados, abandonan el nido y no vuelven. La SEO / Birdlife pide a los visitantes a que tengan en cuenta esta circunstancia y sean respetuosos con este frágil ecosistema.
Ferreiro precisa que la colaboración de los vecinos y visitantes es vital para el futuro de esta especie, en franco retroceso en Galicia. Recuerda, por ejemplo, que aquella puesta del 2014 falló porque «na noite de san Xoán uns xóvenes que estaban na praia desfixeron o niño». El año pasado, los chorlitejos volvieron a intentarlo, pero el portavoz de la SEO /Birdlife indica que «cando unha parella estaba empezando a facer un niño, o tractor do Concello traballou na praia e xa non volveron». Se consiguió el compromiso del Concello de una limpieza más respetuosa y manual de este tramo litoral, pero Ferreiro insiste en que en estos momentos de la primavera el peligro lo suponen «os cans soltos».
El chorlitejo es una especie que depende de los sistemas dunares como los existentes en la costa de Sanxenxo y de O Grove para construir sus nidos y criar a sus polluelos. Es una muestra más de la importancia para la biodiversidad que tienen estas dunas que todavía se preservan en playas como Montalvo, Major y A Lanzada, incluidas también en la Red Natura 2000.