Estados Unidos datará más huesos antiguos hallados en A Lanzada

Marcos Gago Otero
marcos gago SANXENXO / LA VOZ

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UFD-NATURGY

Las catas arqueológicas de UFD sacan a la luz un basurero prerromano

29 sep 2018 . Actualizado a las 08:52 h.

Un laboratorio especializado en Estados Unidos examinará una serie de huesos encontrados por los arqueólogos contratados por UFD -antigua Fenosa y actual distribuidora eléctrica de Naturgy- en las catas previas a una obra en A Lanzada, en Sanxenxo. El objetivo es que estos huesos sean datados mediante carbono 14 y así, se pueda tener una idea aproximada de su edad. Se trata de falanges y pelvis humanas y de restos de animales.

UFD tiene previsto soterrar la línea eléctrica aérea que recorre A Lanzada paralela a la PO-308. Los sondeos fueron la condición previa, impuesta por Patrimonio, para la autorización de los trabajos. De esta forma, un equipo de siete especialistas de la empresa Adro Arqueolóxico y dirigidos por Lino Gorgoso, han realizado un total de doce catas en el entorno del paseo de la carretera PO-308 y el principio del acceso de tierra hacia la ermita, en la cara que mira para Foxos.

Gorgoso informó a Naturgy que los sondeos en la entrada de Foxos, han sido negativos, sin hallazgos relevantes. Sin embargo, el panorama cambió cuando se hicieron los sondeos en el vial de acceso a la ermita. En este tramo, se encontraron materiales romanos, sobre todo ánforas y monedas. En este espacio se ha excavado hasta una profundidad de metro y medio, en una duna edafilizada, es decir, una duna que se formó a lo largo de varios siglos. La arena estaba ya muy compacta, según señalaron desde la empresa eléctrica, tanto que parecía tierra y fue ahí donde se dieron de bruces con materiales romanos.

Amplio espectro temporal

Los descubrimientos más relevantes fueron en la entrada de acceso que lleva a la ermita. Aquí se encontró un concheiro, una especie de antiguo basurero, que todo parece indicar que data de la Edad de Hierro. Por lo tanto, se trataría de una acumulación de desechos de la cultura castrexa, anterior a la llegada de los romanos a Galicia. En este punto, también salieron a la luz cerámicas de varias clases y los restos óseos.

Por una parte, los arqueólogos han encontrado huesos de jabalí, lo que nos da una idea tanto de la fauna que había en aquella época en Sanxenxo, como de la dieta de aquellos primeros gallegos. Los otros huesos, mucho más intrigantes, son humanos, pelvis y falanges.

El descubrimiento de estos restos óseos en este entorno puede servir de indicio de la proximidad de enterramientos. Las tumbas de la necrópolis romana están al otro lado de la carretera PO-308 y se excavaron a mediados del siglo XX. Está por determinar si estas pelvis y falanges son de la misma época y será un análisis forense el que determine si pueden aportar algún indicio sobre la vida que llevaron esos gallegos antiguos. En las cercanas excavaciones de la Diputación se llegaron a encontrar 16 esqueletos, entre adultos y niños.