En A Lanzada, las fanecas pican más en el lado de Sanxenxo

Maruxa Alfonso Laya
M. Alfonso O GROVE / LA VOZ

SANXENXO

MONICA IRAGO

Un estudio, elaborado por el CSIC y Protección Civil, determina que allí la arena es más gorda y hay más alimento

01 sep 2018 . Actualizado a las 08:48 h.

¿Cuándo diría usted que tiene más probabilidades de que le pique una faneca en la playa de A Lanzada? La respuesta a esta pregunta se basaba, hasta ahora, en todo tipo de leyendas y suposiciones. Pero la Unidad Marítima de Salvamento y Rescate en Playas de Protección Civil de O Grove y el Instituto de Investigaciones Marinas, dependiente nada menos que del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), han elaborado un estudio que responde, con base científica, a esta pregunta.

Se trata, asegura, del primer estudio de estas características que se lleva a cabo sobre el arenal pontevedrés, y concluye que es mucho más probable que resulte herido por uno de estos animalitos si visita el tramo de playa que pertenece a Sanxenxo.

Datos desde el 2014

El proyecto fue posible gracias a los datos que en el año 2014 recogieron los voluntarios de Protección Civil. A través de Infolanzada recopilaron datos sobre las condiciones meteorológicas y del agua, y a través de una aplicación web digitalizaron las atenciones en la playa.

«Tiña curiosidade por botarlle un vistazo», explica Xosé Antonio Padín, investigador del instituto vigués. Sobre todo, añade, porque había muy pocas publicaciones al respecto. «Sorprendeume a pouca bibliografía que había e en ningún caso detallaba a elevada incidencia das picaduras», añade. Así que, con los datos en la mano, «tentamos estudar as variedades ambientais ou meteorolóxicas que favorecían o número de picaduras», afirma este experto.

Temperatura del agua

Lo primero que les sorprendió es que «case a metade das picaduras se producen na zona sur da praia», es decir, en la que se corresponde con el término municipal de Sanxenxo. Tiene explicación. «É a zona onde o sedimento é máis gordo e no fondo mariño se debuxan unhas crestas, que son o sitio favorito das fanecas. Tamén hai máis alimento por ser unha zona rochosa», argumenta.

Influye también la temperatura del agua y del aire, cuanto más cálidas sean, más picaduras. En cambio, si el agua está fría, las fanecas se retiran de la zona costera. No les gusta el viento, porque este genera oleaje, contra el que no pueden nadar. Así que cuando eso pasa, se van a zonas más profundas. «A partir de olas de 1,5 metros, non atopamos fanecas na praia», afirma Padín.

Otra característica es que a las fanecas le gusta enterrarse cuando sale el sol. Si entonces está la marea alta, lo hacen muy cerca de la costa. Eso implica que, cuando baja la marea a primera hora de la tarde, ellas se queda en la zona alta de la playa, provocando que sea más fácil herir a los bañistas.

Con todos los datos en la mano, «fixemos un algoritmo co que conseguimos explicar a metade das picaduras das fanecas», explica Padín. Su idea ahora es continuar con la investigación, utilizando para ello los datos que Protección Civil recogió durante años anteriores. El bañista sabrá así las probabilidades que tiene de cruzarse con uno de estos peces.

La investigación fue publicada por la revista especializada «Ecological indicators»

La investigación realizada sobre las fanecas ha tenido una buena repercusión y la prestigiosa revista Ecological Indicators ha publicado los resultados del estudio. «É un exemplo de cómo con datos non científicos se pode facer un traballo que si o é», explica Adrián Lijó, responsable de Protección Civil que colaboró en este estudio. En su base de datos había registradas 1005 picaduras de fanecas solo durante el verano del 2014. «Iso significa que o 0,3 % dos bañistas foron picados nalgunha ocasión», añade. Un índice que «é comparable coa taxa de picaduras de medusas no Mediterráneo», añade Padín. En esas playas, 700 puestos de socorro registraron un total de 100.000 picaduras en un verano. Aquí, solo tres puestos de socorro atendieron a más de mil afectados.