Los arqueólogos orientan a Costas para iniciar la mejora del talud de A Lanzada

Marcos Gago Otero
marcos gago SANXENXO / LA VOZ

SANXENXO

MARCOS GAGO

Uno de los accesos a la ermita estará cortado mientras se desarrollen los trabajos

18 jul 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Un equipo de arqueólogos realiza desde ayer catas en uno de los accesos a la ermita de A Lanzada por si se oculta algún resto de interés histórico bajo este tramo del camino que lleva al famoso santuario. Esta medida es necesaria como paso previo y preceptivo, por parte de Costas, antes de acometer la obra de consolidación del acantilado. El costado derecho de esta entrada de tierra hacia la ermita está dañado desde hace tres años y nueve meses, cuando los temporales del invierno del 2014 provocaron la caída de parte del talud sobre la playa de Areas Gordas.

Después de un largo tira y afloja entre el Concello de Sanxenxo, Costas y la Xunta, finalmente se logró el visto bueno de la comisión provincial de Patrimonio Cultural para que se llevase a cabo el proyecto propuesto por el departamento autonómico. Ese permiso se logró el pasado invierno y existía el compromiso de que Costas ejecutaría la obra antes del principio de la temporada estival. Finalmente, la actuación se retrasó, pero la presencia de los arqueólogos, una pala y obreros esta semana en el lugar indica que todo está encarrilado para que los trabajos de rehabilitación del acantilado se lleven a cabo cuanto antes.

La intervención de los arqueólogos se debe a la obligación legal de supervisar la retirada de tierra de este espacio, ya que a escasos metros se encuentra uno de los yacimientos históricos más relevantes de Galicia. Costas prevé utilizar un sistema semejante al de Paxariñas, con soportes metálicos, para evitar el deterioro de la pendiente.