El Marcón intenta huir al galope de las siete últimas posiciones de la Preferente Sur para evitar un descenso en un año en el que se prevén muchos arrastres por los descensos que llegan de Segunda B. Aún no está todo dicho, pero podría darse la posibilidad de que descendiesen hasta los siete últimos, tres de ellos de forma directa y el resto por los arrastres. De ahí, que la victoria ayer ante el USD O Grove fuese vital para los pontevedreses, que no estaban viviendo una buena racha al encadenar varias derrotas consecutivas.
«Tenemos que escapar como sea de esa zona», señalaba ayer el entrenador del Marcón, Borja Burgos, que asegura que ahora tienen por delante un calendario favorable en el que se medirán a los tres últimos clasificados, como el Gondomar, Nogueira de Ramuín y el Ribeiro. «Son, a priori, equipos factibles para poder conseguir la victoria», reconoce el técnico del Marcón Atlético, que asegura que atrás han quedado las lesiones y las sanciones.
El Beluso y Sanxenxo, en calma
En una situación similar está el Campo Lameiro. Dos puestos por debajo de los de O Carrasco apuran lo que queda de liga para salir de la décimo quinta posición. Ayer venció al Estradense, líder de la tabla, y dio un paso al frente para intentar escapar de los arrastres. Un final de liga más fácil tiene el Sanxenxo y el Beluso. Con pocas opciones de ascenso, los de Luis Buylla están en séptima posición y afrontan con tranquilidad el final de liga después de no lograr más que un empate en Baltar de Arriba.
El Beluso, por su parte, se sacudió hace semanas la presión de lugar por no descender y desde la novena posición observa la liga sin correr ningún riesgo, después de golear al colista por 6-1 en casa.