Sanxenxo cuenta ya con Fomento para reformar el edificio y debe pactar con la Xunta la muestra de piezas de A Lanzada
21 feb 2018 . Actualizado a las 05:00 h.El pazo de Quintáns puede convertirse en el ave fénix de Sanxenxo y resurgir de sus cenizas como ese ser mitológico. En posesión del Concello desde el 2006, el pazo está en la actualidad hecho una ruina. El proyecto de rehabilitación es, en el ámbito cultural, la iniciativa más ambiciosa y costosa de la última década en el municipio. Si prospera, Sanxenxo dispondrá de un museo único en la provincia, que se centrará en los valores ecológicos y paisajísticos de A Lanzada, además de exhibir piezas de interés histórico procedentes del yacimiento arqueológico de la playa de Noalla.
La financiación de la reforma está ya asegurada. El Concello de Sanxenxo tiene partida económica en el presupuesto de este año -480.000 euros-, que entró en vigor recientemente, y también recibirá una inyección nada desdeñable de parte de Fomento: algo más de 900.000 euros del 1,5 % Cultural. Esa cantidad hará mucha falta para poder reestructurar el pazo y está por ver si será suficiente la inversión prevista.
El pazo es una completa ruina. A nadie en su sano juicio se le ocurriría entrar en el inmueble sin un casco y mirando muy bien donde poner el pie. Por fuera, el gran murallón de cierre y la fachada del edificio principal ocultan el desastre del interior. Sin embargo, traspasado el portalón de acceso, la decadencia de Quintáns clama a gritos. Por ejemplo, hubo una época en que el pazo exhibía una impresionante galería de 19 vanos y 250 vidrios. Basta ver la imagen que acompaña este reportaje para darse una idea del trabajo de restauración que hará falta acometer solo en esa galería.
El teniente de alcalde, Gonzalo Pita (SAL), explicó que el mobiliario del pazo no tiene interés histórico, ni valor, con excepción de la imagen de la Virgen en una capilla, y que, por recomendación de Patrimonio, se retiró para evitar su robo. Está custodiada por el Concello y regresará al pazo cuando esté rehabilitado. Pita confía en que antes de fin de año empiecen los trabajos reforma.
El proyecto museístico será otro reto. Pita señaló que se quieren exhibir en el pazo las piezas más significativas del yacimiento de A Lanzada, que ahora custodia la Diputación, promotora de las excavaciones, aunque su propiedad es de la Xunta. El edil sanxenxino cree que su lugar idóneo es Quintáns, donde se podrán mostrar esas piezas, que de otra forma, teme que permanecerían guardadas en cajas en Pontevedra, solo accesibles a especialistas.