Las lluvias provocan un nuevo derrumbe en la Vía do Salnés

Maruxa Alfonso Laya
maruxa alfonso O GROVE / LA VOZ

SANXENXO

MARUXA ALFONSO

La tierra se vino abajo en el tramo entre Sanxenxo y O Grove

09 ene 2018 . Actualizado a las 05:05 h.

Sucede casi cada vez que llueve. Al agua arrastra la tierra que forma parte de los muros de contención de uno de los márgenes de la vía de O Salnés y este se viene abajo, llegando a invadir parte de la calzada. En el tramo de este vial que transcurre entre Sanxenxo y O Grove, esta situación se repite en varias ocasiones todos los inviernos. Y ha vuelto a pasar. El agua caída durante los últimos días ha vuelto a provocar un pequeño derrumbe en uno de los márgenes de esta transitada carretera. Tierra y piedras han caído sobre la calzada y los operarios de mantenimiento del vial se han visto obligados a señalizar la zona, para evitar que los vehículos se vean afectados.

Los pequeños derrumbes de tierra y piedra se han convertido en una constante en las vías de alta capacidad de la comarca arousana. El pasado invierno, una piedra de grandes dimensiones cayó en el tramo de la Vía do Salnés que transcurre entre Cambados y Vilagarcía. Tampoco aquí era la primera vez que sucedía. Varias han sido las ocasiones en las que la Xunta ha tenido que asegurar los márgenes de esta carretera. Sucedió esto también en uno de los viales que sale de las inmediaciones del hospital y llega hasta la parroquia de Baión, en Vilanova. Aquí fue Fomento el que contrató las obras de reparación. Y aconteció lo mismo en la circunvalación que llega hasta Carril. En varios tramos, uno de los márgenes se vino abajo durante uno de los últimos inviernos.

Especial incidencia

Pero en el tramo de Vía do Salnés que transcurre entre O Grove y Sanxenxo, el derrumbe de parte de los muros de contención es algo frecuente. Y es que en los últimos inviernos, esta situación se ha repetido con bastante frecuencia. La concesionaria del vial ha acometido obras en varias ocasiones, pero en cuanto llegan las primeras lluvias, la tierra y las piedras vuelven a invadir al calzada. Eso mismo sucedió el pasado fin de semana y, ahora, se deberá proceder una vez más a su reparación.