El Concello acota un espacio para que niños y jóvenes puedan jugar a la pelota
18 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Los partidos de fútbol infantil y juvenil han regresado a la playa de Silgar, en Sanxenxo, después de la prohibición del Concello el verano pasado y que supuso el desplazamiento de este tipo de actividades al entorno de Baltar, en Portonovo. Los problemas para la convivencia en la emblemática playa entre jóvenes futbolistas y los bañistas hizo saltar más de una chispa el pasado verano. Después de que una niña recibiese un fuerte balonazo que la obligó a ser trasladada en ambulancia al Centro de Salud de Baltar, el anterior gobierno tripartito tomó medidas drásticas y prohibió el uso de la pelota en todas las playas del municipio. De hecho, el Ayuntamiento se negó a permitir los partidos de fútbol que normalmente se celebran en agosto en el extremo de Silgar en el tramo más próximo a punta Vicaño.
Este verano, las cosas han cambiado de forma sustancial. Quizás tampoco se hayan dado casos como el año pasado que obligasen a tomar medidas tan tajantes. Lo cierto es que el actual bipartito, conformado por el PP y SAL, ha vuelto a autorizar el juego de la pelota en Silgar. Eso sí, el Concello no todo el monte es orégano y, por lo tanto, se han puesto algunas condiciones para poder jugar al fútbol en el arenal. El Concello ha delimitado el espacio concreto donde el balón está permitido. Se han puesto unas vallas y dos porterías que acotan el terreno de juego. Este es el entorno autorizado para la práctica deportiva y, al estar a una distancia bastante considerable de la marea de sombrillas, sillas y bañistas, no estorba a nadie.
Los usuarios de Silgar parece que han acogido bien esta decisión. Desde luego, jóvenes y niños sí que la respaldan. La semana pasada se celebraron pequeños campeonatos, por los que pasaron en unos pocos días más de trescientos niños. A Baltar no estarían dispuestos a ir tantos, ni tampoco todos obtendrían el permiso de sus padres para hacerlo. Esta semana todavía hay partidos de fútbol en el arenal y visto el número de espectadores, de todas las edades, y el entusiasmo de los jugadores sobre el terreno, el efímero campo de fútbol de Silgar mantendrá su gran afluencia mientras el sol y las vacaciones lo permitan.
Otra de las prácticas que también causaron su revuelo en su momento son las palas de playa, que también cayeron bajo la prohibición del verano anterior. En esta campaña, no se mantiene el veto siempre y cuando los jugadores no interrumpan el descanso ni el paseo de los bañistas.
Por su parte, en lo que no ha habido cambio alguno es en la prohibición en todos los arenales de Sanxenxo a la hora de bajar perros a la playa. Los canes están excluidos de todos los arenales de bandera azul y, en el caso sanxenxino, de todas sus playas porque las normativas municipales no prevén ninguna excepción al veto general.