La cetrería se alía con los agricultores para salvar los campos de maíz y las huertas
02 sep 2016 . Actualizado a las 12:40 h.Sobre los campos de Nantes (Sanxenxo) y de Lores (Meaño) se librará a lo largo de este mes una guerra aérea. No se asusten, no busquen en el cielo aviones con metralletas, pero a lo largo de este mes, quien se acerque a los maizales de lugares como Reis podrá ver las evoluciones en el aire de distintas especies de rapaces a la caza de cuervos. Es la fórmula para combatir la plaga de córvidos que devasta los campos de maíz y las huertas. Las batidas aéreas están autorizadas por la Consellería de Medio Ambiente y cuentan con el caluroso beneplácito de los vecinos,
Los socios de la Sociedade Galega de Cetrería pueden acercarse, desde ayer y hasta el 30 de septiembre, con sus animales hasta los campos sanxenxinos y soltar a sus aves rapaces. Es lo que los especialistas denominan vuelo libre. Los primeros en desplazarse a esta zona de cultivos fueron Óscar Labarra, de O Grove, y José Grizán, de Vilalba, que acudieron a Reis con dos ejemplares de águila de Harris. Los vecinos, que los esperaban como agua de mayo, no se cansaron de pedirles que fuesen primero por las fincas de unos o de otros y viesen el banquete que se pegan los cuervos cada día. Los espantapájaros tradicionales no funcionan y han perdido gran parte de la cosecha. La cetrería es el último recurso que les queda.
Las águilas meca y lucense surcaron los cielos sanxenxinos a la búsqueda de cuervos. Se trata de «vuelos de marcaje», que estas aves rapaces realizan para tantear el comportamiento de las cornejas y poder preparar sus ataques. En las próximas semanas vendrán más cetreros y en un mes se podrá comprobar el grado de efectividad de esta medida, que ya tiene garantizada el interés de los vecinos por lo espectacular del vuelo de las águilas.
Por su parte, vecinos y Concello de Vilaboa entregaron un escrito en la Xunta reclamando batidas contra los jabalíes y el pago de compensaciones por los daños causados en sus campos.