El Sanxenxo se enfrenta al abismo matemático

Roi Palmás
r. palmás PONTEVEDRA / LA VOZ

SANXENXO

10 may 2015 . Actualizado a las 05:05 h.

El Sanxenxo está al borde del precipio, y lo sabe. Está pagando con la penitencia de ser el cuarto por la cola una pésima racha de muchas semanas consecutivas encadenando derrotas. Si en medio de esa mala racha hubiesen logrado un par de puntos, hoy en día podrían verse fuera de los puestos de descenso. Pero no es así.

El Sanxenxo ocupa la plaza 17. Sería el último en bajar a Regional Preferente, ya que el Bertamiráns, el Cultural Areas y el Laracha son ya equipos descendidos. Por tanto, todas las miradas en el seno del Sanxenxo se reparten en dos terrenos de juego. El del Barbadás, rival de los de Calucho, y en el del Laracha, que recibe al Silva, el gran clavo ardiendo al que se aferrran los amarillos para evitar la quema del descenso.

A las 18 horas, en Os Carrís, jugarán los sanxenxinos el partido que les puede dar aire en la clasificación, el que puede dejar todo visto para la sentencia del último envite liguero o el que puede dar con sus huesos en la categoría inferior. Todo por decidir entre un conjunto que se juega la vida y que se resiste a abandonar una categoría a la que tanto le costó llegar y un enemigo que ya no se juega nada y que podría dar minutos a los menos habituales.

Nadie en el Xuventú Sanxenxo se fía de la lógica y todo el mundo acude a la cita ourensana con la conciencia de que es imprescindible vencer y esperar el error del Silva.

Un tropiezo se podría pagar con el más caro peaje y lo cierto es que nadie arroja la toalla. Calucho ha estado trabajando en capítulo psicológico y asume que acuden «coa idea de gañar» y añade que «son encontros nos que hai moitísimo que perder e pouco que gañar, porque case é unha obriga».

Las ausencias

El técnico amarillo recupera a Cuchi, que cumplió un encuentro de sanción el pasado fin de semana, pero por el contrario pierde a Nel por lesión, uno de los jugadores de mayor peso específico en el dibujo del equipo, ya que por sus botas se canaliza gran parte del potencial ofensivo del cuadro sanxenxino.

Además, no estarán tampoco Alfonso ni Deivi en el eje de centrales amarillo, ni tampoco Diego González.