Cuestación de la AECC en Pontevedra: «La gente colabora bastante, aunque también hay quien dice que no tiene tiempo o ya es socio»

Este jueves, 8 de mayo, es el Día de la Cuestación de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC). En la ciudad de Pontevedra es una jornada que moviliza a 264 personas, entre voluntarios, personal de la entidad y colaboradores externos, para atender las 24 mesas petitorias repartidas por todo el casco urbano. En la situada delante de la Audiencia Provincial, Cristina Luginick comenta con su peto verde que la jornada transcurre sin incidencias. Tras una pausa breve para un café, retoma su labor, hucha en mano y con un papel con pegatinas con el logo de la asociación. «La gente colabora bastante, aunque también hay quien dice que no tiene tiempo o que ya es socio», apunta esta mujer. Ella y sus compañeras de puesto se ríen cuando se les traslada que solo hay mujeres. «A los hombres para esto les cuesta más», responde con una sonrisa una compañera de Cristina. En esta mesa de Rosalía de Castro solo se puede colaborar con la causa con dinero en metálico, pero en otras también hay opción de hacerlo a través de un TPV o mediante una aplicación del teléfono móvil (Divilo). Exponen desde la AECC que son opciones que se incorporaron hace un par de años, pero que ni mucho menos son mayoritarias. El grueso de la gente sigue apostando por el dinero en efectivo.

En esta mañana de jueves era fácil encontrarse también con alumnos de varios colegios que colaboran en la iniciativa o con militares de la Brilat. También quisieron aportar su grano de arena usuarios de Amencer-Aspace, del centro de día Saraiva Sénior, de la asociación Boa Vida o de la Sociedad Gimnástica de Pontevedra. Lo recaudado a través de esta cuestación, que se desarrolla en jornada matinal y vespertina, se destinará a impulsar la investigación en cáncer y a seguir cubriendo las necesidades de pacientes oncológicos y sus familiares, además de impulsar actividades para concienciar a la sociedad sobre la importancia de adoptar hábitos de vida saludables. Recalcan desde la AECC que el objetivo es superar el 70 % de supervivencia en cáncer.

La presidenta de la AECC en Pontevedra, Ana García, que lleva en el cargo desde principios del 2024, destaca el papel que el colectivo lleva haciendo en España desde hace casi setenta años: «La labor de la asociación ha contribuido a aumentar la supervivencia en cáncer y a atender las necesidades de los pacientes y familiares siendo, en muchas ocasiones, pionera y punta de lanza, en la lucha contra la enfermedad». La enfermera jubilada señala la importancia que tienen los donativos de los ciudadanos. «Un año más, este 8 de mayo, en Pontevedra solicitamos ese apoyo y compromiso a los pontevedreses. Es necesario seguir impulsando la investigación oncológica y cubrir las necesidades clínicas y no clínicas de los pacientes con cáncer con equidad e impulsando la humanización de los tratamientos. La lucha contra el cáncer necesita el compromiso e impulso de todos», expone Ana García.

El pasado año el equipo de profesionales y voluntariado de la AECC en Pontevedra llevaron a cabo 24.209 intervenciones en la provincia, de las que 3.782 fueron en la ciudad. De las casi 4.000 atenciones en la capital, 703 se corresponden con el servicio de atención psicológica; 647, con atención social; 335 con logopedia; 777 con fisioterapia y ejercicio físico oncológico y 1.320 es la cifra correspondiente al servicio de apoyo y acompañamiento con voluntariado de la entidad. En la historia de la AECC en la ciudad cabe recordar algunos hitos. Por ejemplo, en el año 2000 se puso en marcha el departamento de trabajo social y en el 2008, en colaboración con la Fundación La Caixa, echó a andar el primer equipo psicosocial a enfermos avanzados en la provincia. En el 2013 Pontevedra se sumó a una campaña nacional de recogida de firmas para que el Ministerio de Sanidad incluyera el cribado de cáncer de colon en la cartera de servicios del Sistema Nacional de Salud. Un año después, en el 2014, nace el servicio de logopedia en Pontevedra y Vigo. En el 2020 se incorpora un nuevo programa de atención psicosocial a pacientes oncológicos en fase avanzada y sus familias que viven en núcleos rurales de alta dispersión poblacional, y en el 2022, comienza el plan de fisioterapia y ejercicio físico oncológico.         

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