
















Los granates tuvieron ocasiones para ganar pese a jugar media hora con diez
12 ene 2025 . Actualizado a las 19:27 h.Fue un punto fuera de casa y permite al Pontevedra mantener los tres de margen en el liderato sobre un Numancia que también igualó, en su caso en su visita al Compostela, pero es un punto agridulce para el conjunto granate, que tuvo ocasiones suficientes para llevarse los tres pese a jugar en inferioridad numérica durante la última medida hora del encuentro.
Tan pronto como el balón comenzó a rodar sobre el terreno de juego quedó claro cuál iba a ser el guion. En el proceso de aprendizaje que deben tener los jugadores de un equipo filial, la lección que programó el técnico del Valladolid B fue la de saber aguantar ante un rival superior. Superior parecía el Pontevedra antes de comenzar el encuentro, o así lo asumieron los pucelanos con su plan de partido, y superior lo fue también desde el primer minuto. El duelo fue un monólogo en granate durante la primera mitad. Un monólogo al que solo le faltó que los chispazos fueran más continuos, porque lo cierto es que pese a que el partido se jugó prácticamente en campo de los locales, no llegaban las ocasiones. La primera fue un centro desde la derecha al que estuvo cerca de llegar Charly. Luego llegaron un disparo de Yelko Pino y un cabezazo de Pelayo, que detuvo sin mayores problemas Aceves.
El portero del Valladolid fue el gran protagonista del encuentro. Su primera irrupción estelar llegó en el último minuto de la primera parte, cuando detuvo un remate de Garay prácticamente sobre la línea de gol en una parada que parecía imposible.
Dos jugadas claves
Al descanso se llegó sin goles y no cambió mucha la dinámica en el inicio de la segunda mitad. Seguía mandando el Pontevedra ante un Valladolid B pertrechado ante su área, sin ni siquiera ser capaces los locales de organizar alguna contra que cambiara el ritmo del partido o, al menos asustara mínimamente a los granates, pero en apenas un minuto todo cambio. Primero, Charly mandaba al palo un remate de cabeza que pudo haber colocado el 0-1 y, apenas unos segundos después, Samu Mayo veía la segunda cartulina amarilla al llegar tarde a una acción. Se quedaba el cuadro granate con diez jugadores con media hora por delante.
Ni siquiera en inferioridad perdió, al menos en un principio, el interés el Pontevedra por seguir mandando. De hecho, apenas tres minutos después de la expulsión, Xabi reclamó un penalti tras ser derribado por Arconada.
A partir del minuto 70 sí que pareció que el Pontevedra prefirió guardar la ropa a nadar y, por fin, se desperezó el Valladolid B y se asomó a la portería de Edu Sousa. Primero, con un centro de Coque que despejó Pelayo y cinco minutos más tarde con la primera intervención del portero granate tras un remate de Neira.
Sin agobios
El Pontevedra también pareció sentirse cómodo en ese cambio de chip. Bien asentados atrás y sin pasar mayores agobios ante los locales, que sí se atrevieron a cruzar el centro del campo e incluso a buscar alguna combinación, pero muy tímida. De hecho, los granates siguieron buscando alguna contra que pudiera derivar en el gol de la victoria, pero las fuerzas ya no eran las mismas.
Y, cuando parecía que el encuentro no iba a dar ya para más llegaron otras dos ocasiones clarísimas para los granates. Primero tras una jugada de Dalisson por la línea de fondo. El granate cedió el balón a Yelko Pino y el centro lo remató Álex González con una chilena espectacular que rechazó el larguero después de que pareciera que Aceves desviaba ligeramente el balón. Era el minuto 91 y en la acción siguiente todavía pudo marcar el cuadro granate. Lo impidió, de nuevo, un estelar Aceves que desvió el disparo de Igor. Cómo vio por dónde le llegaba el balón entre esa nube de jugadores es algo que tendrá que explicar, pero desvió el esférico y el encuentro acabó con empate sin goles.
Valladolid B
Aceves, Raúl Chasco, Frimpong, Arnu (Neira, min 63), Xavi Moreno, Jorge Delgado, Gabriel, Alin (Koke, min 62), Iker Ivorra (Sergi, min 69), Mario Sesé (Rulo, min 62) y Arco.
Pontevedra
Edu Sousa, Igor, Álex González, Iago Novo, Yelko, Samu, Xabi (Rares, min 65), Dalisson, Garay, Pelayo y Charly (Héctor, min. 83).
ÁRBITRO: Ibai Rezola Etxeberría (País Vasco), auxiliado en las bandas por Aitor Urízar Díaz y Josue Villaquiran Bidegain. Expulsó por doble amonestación a Samu Mayo. Mostró amarillas al local Sesé y a Igor y Garay en el conjunto visitante.