Mi padre tiene más de 60 y encontró trabajo después de 6.700 días en paro

La Voz CARTAS AL DIRECTOR

PONTEVEDRA CIUDAD

miguel souto

22 dic 2024 . Actualizado a las 15:09 h.

Encontró trabajo siendo sexagenario 

Ha sido el denostado Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) el que ha dado una oportunidad a mi padre después de 6.700 días sin tener donde echar un jornal. Durante más de 10 años ha consumido sus ahorros mientras compatibilizaba todo tipo de cursos de formación con la tareas domésticas. Envió currículos a todo tipo de bolsas de empleo y puerta a puerta por las empresas para finalmente ser rechazado por edadismo. Fue un niño que echó los dientes trabajando en el sector primario, ayudando a sus padres en las tareas agrícolas para después de licenciarse de la mili obligatoria e incorporarse al subsector de la construcción hasta que fue despedido en los últimos coletazos de la gran recesión. A finales de diciembre firmará un contrato de seis meses con posibilidad de pasar a indefinido. Se incorporará a principios del 2025. Ver a mi padre, ya sexagenario, como un niño con zapatos nuevos es el mejor regalo que puedo recibir esta Navidad. José Solano. Cartagena.

 La Virgen de la O, nula repercusión en Pontevedra

El día 18 de diciembre se conmemora la festividad de la Virgen de la O, patrona de Pontevedra. Esta información que, sin duda, debería ser una obviedad, para muchos pontevedreses posiblemente sea una novedad, porque piensen que la patrona de la ciudad es la Virgen de la Peregrina. A este respecto, todos los años me llama poderosamente la atención, la poca trascendencia que se da a este día, reduciéndose los actos conmemorativos a la misa cantada de las 18,30 en la iglesia de San Bartolomé, concelebrada con párrocos de la archidiócesis en Pontevedra y en la que destacan, entre los asistentes, una representación del Concello y los responsables de Protección Civil. Al hilo del poco interés que suscita esta fiesta, podemos observar la escasa o nula repercusión mediática que despierta. Algo que a mi entender supone un grave error, porque esta festividad, al margen de los sentimientos religiosos de cada uno, bien merece un reconocimiento. Adolfo Costas. Pontevedra.