Ejercicio físico de alta intensidad y realidad virtual, así mejoran pacientes de párkinson

PONTEVEDRA CIUDAD

Un estudio de investigadores del campus de Pontevedra constata los efectos positivos de esa combinación en la capacidad funcional y calidad de vida
11 dic 2024 . Actualizado a las 20:14 h.Un estudio de investigadores del campus de Pontevedra confirma los efectos positivos de combinar ejercicio físico de alta intensidad y realidad virtual en pacientes de párkinson. Es el resultado de un proyecto desarrollado por el grupo HealthyFit en colaboración con la Asociación Párkinson Provincia de Pontevedra (Apropark). La iniciativa se denomina Integra-Park y participaron doce pacientes que se encuentran en los estadios I a III de la enfermedad. Según explican desde la Universidade de Vigo, unas gafas de realidad virtual, sincronizadas con un cicloergómetro y un remoergómetro inteligentes, permitieron que personas con párkinson pudieran llevar a cabo un programa de actividad física de 14 semanas. En concreto, fueron dos sesiones semanales de 25 minutos, una de ellas dedicada a pedalear y otra a remar por diferentes entornos virtuales.
Mediante el uso de exergames, los participantes desarrollaban la actividad física mientras se desplazaban por los canales de Venecia o participaban en una carrera ciclista, realizando a la vez pequeñas tareas cognitivas y de toma de decisiones en el marco del propio videojuego. El investigador principal del grupo y catedrático de la Facultade de Ciencias da Educación e do Deporte, José María Cancela, expone que el proyecto Integra-Park buscaba evaluar los efectos de este programa en la capacidad funcional, calidad de vida y progresión de la enfermedad. Anteriores estudios ya habían demostrado el impacto positivo del ejercicio físico en la sintomatología de esta patología neurodegenerativa y, en concreto, del realizado a alta intensidad, ya que genera mejoras en la inflamación sistémica y neuroplasticidad de estos pacientes.
Los resultados de este análisis se recogen en un estudio publicado por José María Cancela y los investigadores de la Facultade de Fisioterapia del campus de Pontevedra Gustavo Rodríguez y Pablo Campo en el Journal of Functional Morphology and Kinesiology. ¿Qué logros registraron? Constaron mejoras en diferentes parámetros referidos a la capacidad funcional, como la movilidad, el equilibrio dinámico y la fuerza muscular. En este último ámbito se alcanzó una mejora del 24 % en las variables referidas a la fuerza de los miembros inferiores. Se trata de un parámetro relevante para evaluar su grado de autonomía. Cancela apunta que uno de los síntomas motores del párkinson es «que comezan a desprazarse arrastrando os pés, o que moitas veces causa a perda de ton muscular no tren inferior». La intervención también generó un incremento de la fuerza de presión en las dos manos, un parámetro identificado como indicador del síndrome de la fragilidad y que, en caso de descender, señalaría una aceleración de la progresión de la enfermedad.
El programa también permitió mejorar su capacidad aeróbica en un 10 %, así como la percepción que tienen de diferentes aspectos relacionados con su calidad de vida. Así destacaron sus efectos positivos para el desarrollo de las actividades de la vida diaria y para la disminución del malestar corporal, registrándose una mejora del 44 % en las variables dirigidas a evaluar su bienestar emocional. El plan se desarrolló con la financiación del cuarto Plan Social de Ence.