Los primeros minutos estuvieron realmente igualados
10 nov 2024 . Actualizado a las 10:30 h.Tras dos jornadas sin encontrarse con la victoria, el Cisne tenía que hacer frente a la visita del Barcelona II, un equipo que, al igual que los pontevedreses, lleva unas primeras ocho jornadas bastante irregulares. El equipo de Quiños sufrió una nueva derrota en el Municipal ante un rival que sale muy reforzado del Municipal y ya empata al Cisne en puntos en la clasificación, todo después de una muy mala segunda parte en la que el conjunto de Pontevedra se dejó llevar en muchos tramos, lo que le costó dejarse los puntos en casa.
Como era de esperar, los primeros minutos del encuentro estuvieron realmente igualados, con las defensas destacando por encima de todo. El Cisne estuvo muy impreciso y desacertado en fase ofensiva, y no fue hasta superado el minuto siete cuando Mateo Arias logró abrir la lata para los suyos con el 1-1. El Barça empezó a carburar y a entrar más y mejor en el partido, y el primer ‘+3' de los catalanes provocó el primer tiempo muerto de los pontevedreses, que todavía encajaron dos tantos más para que el equipo catalán se colocase 4-9 en un parcial descomunal y empezase a tener un control claro del marcador.
A partir de este punto, el Cisne consiguió empezar a anotar de una forma más regular, reduciendo la diferencia poco a poco hasta llegar incluso a empatar el encuentro en varias ocasiones (10-10, 12-12), aunque en ningún momento logró ponerse por delante. Ambos equipos se iban a vestuarios con una diferencia prácticamente mínima para un Barça que se había mostrado superior tras la primera media hora.
Segundo tiempo
El segundo tiempo continuó con la misma tónica, aunque el equipo culé consiguió volver a tomar por completo el control del partido aprovechando los contraataques rápidos y un Yanis Dury que era un auténtico torbellino por la parte izquierda del ataque blaugrana. De nuevo, los cinco tantos de diferencia obligaron a Quiños a pedir otro tiempo muerto, que pareció despertar ligeramente a un Cisne que se volvió a colocar a tan solo dos goles de diferencia (26-28) con la mitad del segundo asalto todavía por delante. Pero los siguientes minutos fueron los que condenaron al Cisne por completo, desconectándose de nuevo del partido y encajando varios goles seguidos que parecían significar el punto y final al encuentro.
Con los últimos diez minutos en el marcador, el entrenador pontevedrés se vio obligado a solicitar un tiempo muerto con cierta urgencia tras encajar un horrible parcial de 5-1, que dejaba el marcador en una diferencia de seis tantos que, sin una reacción rápida, parecía que iba a costar el partido al Cisne. Pero, al contrario que lo que indicaban las sensaciones, este tiempo muerto dio alas al equipo, que parecía resucitar de entre los muertos para entrar de lleno en la pelea por los puntos a falta de apenas dos minutos.
La reacción, eso sí, llegaba demasiado tarde, y a pesar de que Mateo Arias colocaba el 33-35 tras una contra finalizada de forma perfecta por el extremo, el Cisne se quedaba sin puntos al no ser capaz de reducir la diferencia más allá de esos dos tantos. Una nueva contra, esta vez mal ejecutada por parte de los pontevedreses después de que el propio Mateo no consiguiera agarrar el balón, dejaba al Cisne contra las cuerdas y teniendo que defender el ataque culé. Faltando treinta segundos, el Barça II prolongó esa diferencia hasta los tres goles, y anotó el definitivo 33-37 para sentenciar de forma definitiva el encuentro.
Con este complicado encuentro, la racha de partidos sin ganar de los pontevedreses se extiende ya hasta los tres, con dos derrotas de forma consecutiva. La semana que viene, los de Quiños tendrán que buscar levantarse en una pista difícil, ante un Alcobendas que actualmente está por encima en la clasificación, marcando la zona de Playoffs.