La ciudad enloquece con el duelo entre dos de los grandes equipos de la Euroliga en el Dream Game que inaugura el Torneo EncestaRías
12 sep 2024 . Actualizado a las 10:19 h.Pontevedra demostró que tiene ganas de baloncesto. Y mucho. El Dream Game fue el sueño cumplido de los que llenaron el pabellón en una noche de básquet con mayúsculas. En la pista, el Mónaco, pero sobre todo el Real Madrid, que este miércoles de vuelta al cole se llevó el aplauso de cientos de niños que no se quisieron perder a un equipo que no pisaba la ciudad desde hace 35 años.
El Mónaco llegó sin Mick James en la pista, pero sí en la grada. El MVP de la Euroliga acompañó resto del equipo habitual de la competición. También Chus Mateo quiso probar a los suyos y dispuso de partida a Campazzo, Deck, Hezonja, Musa, y Tavares. Recuperó a estos tres últimos tras su ausencia en el primer amistoso por estar en Zagreb en el homenaje de Petrovic. Lo que podía ser una final de la Euroliga fue un amistoso con la intensidad propia de la pretemporada de dos plantillas que acaban de empezar a rodar. Ambos equipos demostraron deficiencias en la faceta anotadora con demasiadas pérdidas de balones en el inicio, que enmascararon con tiros cómodos impropios en dos de los mejores equipos de Europa.
Ante la dificultad de anotar en el tiro estático, fueron rápidos al contraataque con algunas intervenciones de Alberto Abalde, que levantaron a la grada. Porque este miércoles Pontevedra era blanca. Al descanso, 35-30 para el Real Madrid, que no fue capaz de romper le partido ante un Mónaco que engordó el marcador gracias a los tiros libres de Korkmaz en los dos primeros cuartos, pero que los condenaron tras el paso por vestuarios. Lo salvó el dominio del rebote.
El tercer cuarto ganó en intensidad, a pesar de la ausencia de Musa. Era un amistoso, pero ninguno quería perder. Esa rivalidad que estaba latente se manifestó en la recta final del partido con dos técnicas a Hezonja, una de ellas por encararse al árbitro. Abandonó el partido. Los de Chus Mateo afrontaron el último minuto dos abajo. Tiros libres para Musa, que no falla y amplía a cuatro la ventaja. A falta de tres segundos, empate a 75 en el electrónico. 2+1 de Montiejunas, pero falló el libre, rebote en ataque del Mónaco y canasta de Okobo para amenazar con una prórroga. Deck anota sobre la bocina para llevarse el Dream Game ante una grada que estalló como si lo que realmente se estuviese jugando fuese la final de la Euroliga.
El baloncesto continuará mañana con los cruces del Torneo EncestaRías ente el Leyma, Breogán, Valencia y Mónaco.
FICHA
77 - REAL MADRID: Facundo Campazzo (8), Mario Hezonja (5), Dzanan Musa (19), Gabriel Deck (14), Walter Tavares (2) —cinco inicial—. Alberto Abalde (11), Xavier Rathhan-Mayes (2), Hugo González (3), Serge Ibaka (8), Andrés Féliz (5), Eli-Jhon Ndiaye.
75 - MÓNACO: Jaro Blossomgame (4), Furnak Korkmaz (9), Donatas Montiejunas (11), Vito Brown (9), Nick Calathes (5) —cinco inicial—. Georgios Papagianis (4), Alpha Diallo (10), Peter Cornelie(2), Jaiteh, Okobo (21).
PARCIALES: 21-17, 14-13 (35-30, descanso), 25,25, 17-20 (final 77-75)