«El rugbi es un deporte sano donde crecer con unos muy buenos valores»

sheila ceuve PONTEVEDRA / LA VOZ

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CAPOTILLO

Dos clubes comparten en Pontevedra la pasión por este deporte

03 sep 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Ya son muchos los niños que sueñan con tener una carrera deportiva a lo largo de su vida. Todos desean vivir ese estilo de vida deportivo, en el que el rendimiento y el sacrificio vayan de la mano de la diversión y el compañerismo. El espíritu deportivo en Pontevedra es uno de los atributos por excelencia de la ciudad, así como el fútbol o el balonmano son los grandes protagonistas de la Boa Vila, existen otros deportes que cuentan con un factor innovador e inclusivo que opaca a los más asentados.

El rugbi cuenta con dos clubes en Pontevedra que lo que buscan es abrir las puertas a todas las nuevas generaciones que busquen un «deporte sano donde crecer con unos muy buenos valores que merecen la pena», tal y como describe Alberto Fernández Aboal, presidente del Pontevedra Rugby Club.

Ya hace muchos años de la llegada de este deporte a la ciudad gallega de Pontevedra con el club Mareantes, que tuvo su origen en 1988 y que ya lleva 35 años formando a niños y niñas en esta disciplina. Por su parte, el otro club de la ciudad, el Pontevedra Rugby Club cuenta con el gran logro de ser el primero con un equipo femenino en la ciudad, y que el año pasado fundó, por primera vez, una escuela en Poio. Ambos clubes buscan «fomentar cada vez a más niños a que jueguen al rugbi y que vayan progresando en la competición igual que se hace en otros deportes, evidentemente, con un deporte que es o parece ser minoritario», aunque Manuel Enrique, directivo del Mareantes matiza que de toda la comunidad autónoma, Pontevedra «tiene mucho tirón» siendo la ciudad gallega con más fichas infantiles.

La inclusión como valor

«Una de sus ventajas es que es muy fácil de practicar, no se necesitan unas habilidades especiales salvo la coordinación», y es que, tal y como cuenta Manuel, en el rugbi hay un sitio para cada uno. Los equipos están formados por 15 jugadores, donde cada uno tiene su función en el campo según su complexión física. Además, el reconocimiento es rápido puesto que el aprendizaje no conlleva mucho tiempo, haciéndote sentir útil en el terreno de juego desde el primer día. «Un niño que coja el balón y corra veinte metros, será aplaudido por los compañeros, cuando en el fútbol puedes pasar cien veces el balón y nadie te dice nada», recalca el directivo del Mareantes.

Por otra parte, la categoría femenina también tiene mucho peso dentro del club, y es que tanto los chicos como las chicas juegan juntos hasta los 17 años. Es considerado un deporte mixto hasta esa edad, y a partir de ahí se separa en femenino y masculino. «Las niñas tienen un referente. Somos campeonas de liga y copa aquí en Galicia, entonces, las deportistas no solo ven que su escuela tiene ese tipo de respeto por la diversidad, sino que también ven que las entrenan jugadoras del primer equipo y que compiten en grandes equipos», cuenta Alberto Fernández. Ambos clubes cuentan con títulos a nivel autonómico y el futuro de esta disciplina deportiva es prometedora, sobre todo, con el empuje mediático que les han dado los Juegos Olímpicos de París, «nos han llegado varias peticiones por esa vía, ‘lo hemos visto en la televisión y queremos saber cómo podemos venir y jugar’», relata el presidente del Mareantes.

Ahora el objetivo es seguir captando gente nueva que formar, yendo por ejemplo, a los colegios o llevando a cabo jornadas de puertas abiertas como las que tienen lugar cada lunes, miércoles y viernes a las 19 horas en el campo del Monteporreiro, como iniciativa del club Mareantes.