Alumnos de FP dual harán prácticas de resonancia magnética y TAC en centros del Sergas

Las instalaciones del centro integrado de formación profesional (CIFP) Montecelo, de Pontevedra, fueron el lugar elegido este lunes para la firma de un convenio de colaboración entre las consellerías de Sanidade y Educación para impulsar la FP en el ámbito sanitario. En el laboratorio de biología molecular Román Rodríguez y Julio García Comesaña explicaron que la formación dual es una de las patas de este acuerdo, que permitirá retribuir a los alumnos al tiempo que hacen las prácticas. Inicialmente se aplicará a la resonancia magnética y TAC, dos técnicas muy especializadas que requieren una formación adicional, dijo el titular de Sanidade. No se descarta que, en el futuro, se pueda extender a otras técnicas o procedimientos. En virtud de ese convenio, los futuros técnicos harán prácticas remuneradas en centros del Sergas en esas dos técnicas. Ambos conselleiros pusieron en valor el trabajo de los técnicos superiores y de grado medio que se forman en ciclos de la rama sanitaria, como los de farmacia comunitaria y anatomía patológica que se pueden cursar en el CIFP Montecelo. Subrayó Comesaña que entre los 43.000 trabajadores que tiene el Sergas los técnicos sanitarios desempeñan un papel que «cada vez máis importante no ámbito do diagnóstico na bioloxía molecular, ADN, xenómica, diagnóstico por imaxe», afirmó.

Por su parte, el conselleiro de Educación apuntó que la idea de la Xunta es concentrar la oferta de FP de la rama sanitaria del área de Pontevedra y O Salnés en el CIFP Montecelo, tanto por tradición como por su proximidad al nuevo hospital Gran Montecelo. «A sanidade e a educación son as dúas grandes políticas públicas. Formamos aquí a algúns profesionais que traballan para o Sergas. Temos moitas liñas de colaboración e canta máis interacción haxa entre formación e empregadores mellor para dar un servizo sanitario de calidade», expuso. Román Rodríguez aludió a que con la firma del acuerdo se da un paso más firme orientado a la formación de FP dual en centros del Sergas. El otro ámbito del acuerdo es la acreditación de competencias. «Podemos acreditar coñecementos e facilitar ben sexa para promocionar no ámbito laboral ou mellorar a formación en servizos xerais», dijo Comesaña. Ese reconocimiento de competencias podrá facilitar el acceso del personal a una titulación de FP, convalidando determinados módulos, y también servirá al Sergas para valorar las competencias reconocidas como un instrumento de desarrollo y promoción dentro de sus cuadros de personal.

Cárceles y urgencias

A preguntas de los periodistas, el conselleiro se refirió a la falta de médicos en las cárceles gallegas y a la protesta que este lunes llevaron a cabo facultativos de urgencias de los hospitales públicos. Sobre el primer asunto, Comesaña señaló que la falta de médicos también afecta a la sanidad penitenciaria. Expuso que es un problema general que el Gobierno tiene en Ceuta y Melilla y en las cárceles. «Cando non hai médicos nos cárceres recurren ás comunidades autónomas, a esta e a todas. O que queremos definir é en que casos nós temos que ir», dijo el titular de Sanidade, que hizo hincapié en que están dispuestos a cubrir ese servicio siempre que sea sin restar ningún recurso a la población, dándole la misma asistencia a los reclusos que a cualquier ciudadano pero solo en casos de emergencia. Abogó por establecer un protocolo y también reclamó que desde las cárceles se facilite la entrada a los facultativos. Puso un ejemplo reciente de lo que no puede suceder: que se impida la entrada de un médico por no llevar encima el DNI.

En cuanto a las demandas de los médicos de urgencias, el responsable de la Administración sanitaria aseguró que la Xunta no tiene ningún problema en revisar ese acuerdo del 2007, pero el foro para hacerlo es la mesa sectorial donde están los sindicatos con representación. Si bien comentó que el acuerdo del 2023 también se aplica a los facultativos de estos servicios de urgencias e implica, entre otras medidas, una reducción gradual de la jornada de las 37,5 horas a las 35. Recordó que el 30 % de los facultativos de familia acaban en los servicios de urgencias. Hizo hincapié en que a día de hoy no hay esta especialidad y Galicia es su máxima defensora.     

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