El Cisne se empieza a despedir de la Asobal (29-33)

La Voz PONTEVEDRA / EFE, REDACCIÓN

PONTEVEDRA CIUDAD

Los de Javier Márquez se condenan al fallar en su examen final con el Atlético Valladolid

14 may 2023 . Actualizado a las 22:28 h.

El Cisne ha empezado a entonar sus últimos cantos en la Liga Asobal. Cualquier opción de milagro pasaba por derrotar este domingo en Pontevedra al Recoletas Atlético Valladolid, pero lejos de ello, el colista sumó una nueva derrota, 29-33. Un parcial visitante de 1-8 entre el final del primer tiempo y el inicio del segundo le dio una renta de seis goles al cuadro vallisoletano, insalvable para los locales.

El Cisne notó, sobre todo en el ataque posicional, la baja del portugués Gabriel Cavalcanti, que volvió a lesionarse con su selección. Pese a todo, entró muy enchufado al duelo, consciente de que se jugaba su última bala para engancharse a la pelea por la salvación. Apoyándose en su trabajo defensivo y en varias paradas de Kilian Ramírez, empezó mandando en el marcador. El Valladolid, castigado muy rápido con dos exclusiones, era incapaz de recortar su desventaja, y su entrenador, David Pisonero, pidió tiempo muerto antes de que el Cisne cogiera una renta de tres goles (8-5).

Los pucelanos, pese a perder al brasileño Guilherme Toledo por descalificación, ajustaron su defensa, y eso ayudó a que el portero César Pérez empezase a tocar balones. Con un 0-3 igualó rápido, obligando a Javier Márquez a pedir tiempo muerto. Un parón que no reactivó a su equipo, demasiado fallón en ataque y blando en defensa. Dos errores seguidos del extremo derecho Carlos Álvarez dieron el mando del electrónico al conjunto pucelano, que ya no lo perdería.

En el arranque del segundo tiempo, el Valladolid cogió una renta de seis goles que pareció sentenciar el partido (14-20, minuto 35). El Cisne, con una defensa más presionante, tuvo un amago de reacción con un parcial de 5-2, pero entre César Pérez y los errores infantiles de los locales certificaron el triunfo vallisoletano y el descenso virtual pontevedrés.

Al término del choque, el entrenador del Cisne, Javier Márquez, ponía voz al estado de ánimo de una plantilla que se sabe ya descendida: «A pesar de que sabíamos que la situación era difícil, teníamos la ilusión de seguir al menos con ciertas opciones hasta el final. Teníamos puestas muchas ilusiones en este partido y no hemos sido capaces de competir. Hemos fallado 23 lanzamientos a portería [...] La gente está abatida, desolada. Tenemos que pasar nuestro duelo y a partir de mañana preparar los siguientes partidos».

FICHA DEL PARTIDO:

CISNE (29): Ramírez, Carlos Álvarez (5), Pombo (4), Dedu (2), Iván Calvo, Furtado (4) y Mateo Arias (4) —equipo titular— Franzini (ps), Chan (7, 2de p.), Franceschetti (1), Ocaña (1), Dani Serrano (1), Bruno Vázquez, Conde y Dani López.

RECOLETAS ATLÉTICO VALLADOLID (33): César Pérez, Oriol Blanco (1), Toledo (1), Borja Méndez (2), Álvaro Martínez (3, 1 de penalti), Freitas (3), Miguel Camino (1), Rosell (3), Dimitar Dimitrioski (4), Herrero (7), Miguel Martínez (8) y Dimitrievski. 

MARCADOR CADA CINCO MINUTOS: 3-2, 5-5, 8-6, 10-9, 12-13, 13-16 (descanso); 14-19, 18-22, 21-24, 22-28, 25-31 y 29-33.

ÁRBITROS: Bustamante y Álvarez Mata. Mostraron roja directa al visitante Toledo (min.12). Además, excluyeron a Mateo Arias, Iván Calvo, Dani Serrano y Dedu por parte del Cisne, y a Pedro Martínez, Álvaro Martínez, Rosell, Dimitrievski y Freitas por parte del Atlético Valladolid.