La Real Basílica de Santa María la Mayor acogerá este viernes la bendición del pan por la festividad de San Blas
02 feb 2023 . Actualizado a las 16:08 h.Transcurridos cuarenta días desde que los católicos sitúan el nacimiento de Jesucristo, este jueves la Iglesia conmemora la Presentación de Jesús en el Templo y la purificación de la virgen María después del parto, festividad conocida popularmente como La Candelaria. Es por ello, y como viene siendo habitual en Santa María la Mayor de Pontevedra, habrá una celebración extraordinaria esta tarde (18 horas) en la basílica que «consistirá en una sencilla oración de acción de gracias, bendición y presentación a la virgen María de los niños bautizados en esta iglesia durante el año 2022 en compañía de sus parientes más próximos: padres, padrinos, hermanos, abuelos...».
De igual modo, «aquellas familias que así lo deseen, podrán imponer a los niños el escapulario de la virgen del Carmen, como signo de protección», remarcó el párroco Javier Porro. La celebración concluirá con un ágape festivo en el centro social parroquial.
Festividad de San Blas
Por otro lado, este viernes, se conmemora la fiesta de San Blas de Sebaste, «obispo armenio que fue martirizado en el siglo IV durante la persecución del emperador romano Licinio» y que «había ejercido previamente como médico, atribuyéndosele varias curaciones milagrosas». Es por ello que, precisó Javier Porro, «se considera especial intercesor ante las afecciones de garganta, tan comunes en esta época del año». Esto explica que su iconografía lo muestre con una de sus manos cubriéndose el cuello.
En el caso de esta jornada, y como es costumbre en muchas localidades españolas, la Real Basílica de Santa María la Mayor de Pontevedra acogerá la bendición del pan en las misas de 9.30, 11 y 20 horas.
Novena de Lourdes
Por otro lado, este viernes también comenzará la novena en honor de Nuestra Señora de Lourdes, como preparación de la Jornada Mundial del Enfermo. En esta edición, el lema elegido por la Conferencia Episcopal es Déjate cautivar por su rostro desgastado, de tal modo que se pone «el foco en el cuidado y atención a las personas mayores», concluyó Javier Porro.