Olalla Otero: «La alimentación es clave para modular la microbiota»

Cristina Barral Diéguez
cristina barral PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

Olalla Otero es autora de «El revolucionario mundo de los probióticos»
Olalla Otero es autora de «El revolucionario mundo de los probióticos» LA VOZ DE LA SALUD

La doctora en Biología asegura que los probióticos van a revolucionar la forma de enfocar el tratamiento de muchos trastornos y patologías

01 dic 2022 . Actualizado a las 09:01 h.

La doctora en Biología y experta en microbiota Olalla Otero (Vigo, 1987) presenta esta tarde en Pontevedra su libro El revolucionario mundo de los probióticos. El acto está organizado por la empresa Nutribiótica y la asociación Asseii de pacientes con enfermedades inflamatorias intestinales y ostomizados. Tendrá lugar a las 19.30 horas en el edificio administrativo de la Xunta en Benito Corbal con entrada libre hasta completar el aforo. Olalla Otero, que tiene un máster en Seguridad Alimentaria, explicará qué papel juegan estos microorganismos en la salud.

—¿Por qué es revolucionario el mundo de los probióticos? ¿Qué son?

—Los probióticos son microorganismos, normalmente bacterias y alguna levadura que en cantidades adecuadas tienen beneficios para nuestra salud. El mundo de los probióticos va a revolucionar la forma de enfocar el tratamiento de muchos trastornos y patologías donde sabemos que la alteración de la microbiota está presente.

—Una cosa son los probióticos y otra los alimentos fermentados...

—Cuando hablamos de probióticos no nos referimos a alimentos fermentados como el yogur, el kéfir, la kombucha, etcétera. Estos alimentos pueden contener ciertos microorganismos (si no están pasteurizados) porque se emplean para su elaboración, sin embargo, no sabemos ni cuáles, ni en qué cantidad están. No se pueden extrapolar las utilidades de los probióticos a los alimentos fermentados, aunque puedan ser interesantes dentro de una dieta equilibrada. Para llevar a cabo la microbioterapia, uso de probióticos con un fin terapéutico, no podemos seleccionar cualquier microorganismo. Se pueden emplear probióticos para mejorar síntomas intestinales como la diarrea o el estreñimiento, pero también han demostrado utilidad en trastornos extraintestinales.

—Se dice que el aparato digestivo es como un segundo cerebro. ¿Lo cuidamos lo suficiente?

—Muchas veces se denomina así. Por un lado, en el intestino tenemos millones de neuronas y, por otro, nuestra microbiota intestinal produce o modula la producción de neurotransmisores y otras moléculas con las que se puede influir en el funcionamiento del cerebro. Por eso, se ha estudiado cómo mejorar la salud mental y cerebral, entre otras intervenciones, modulando la microbiota. Una mala alimentación, el abuso de fármacos o algunas infecciones pueden alterar la composición de nuestra microbiota y afectar a este eje intestino-cerebro.

—¿La microbiota sigue siendo la gran desconocida o ya no?

—Desde hace décadas conocemos gran parte de nuestra microbiota, realmente lo que se conoce es el ADN de nuestros microbios. Pero aún queda mucho por descubrir, la mitad de ese ADN es lo que se conoce como materia oscura, no se sabe a qué microorganismo o virus pertenece. Seguro que en los próximos años se harán grandes descubrimientos en este sentido.

—¿Qué cosas que están en nuestra mano podemos hacer para favorecer una buena microbiota y cuáles debemos evitar?

—La alimentación es clave para modular la microbiota, si incluimos alimentos prebióticos vamos a nutrir adecuadamente a nuestra microbiota. Sin embargo, si seguimos una dieta a base de ultraprocesados nuestra microbiota se resentirá. Tiene un impacto negativo en nuestros microbios el estrés o el sedentarismo. Mientras que para tener una microbiota diversa y saludable será muy positivo, además de una dieta equilibrada, el contacto con la naturaleza, tener mascotas o muchos contactos sociales.

—¿Hay relación entre las malas digestiones y la microbiota?

—Lo que se conoce como digestiones pesadas es, en muchos casos, un trastorno funcional del tracto gastrointestinal. En los últimos años se está poniendo de relieve el importante papel de la microbiota en estos trastornos conocidos como funcionales.