Las ocasiones más claras para los granates llegaron en la segunda parte
19 nov 2022 . Actualizado a las 22:25 h.Si un equipo puso las ocasiones en este sábado lluvioso en Pasarón fue el Pontevedra CF. Lo intentó durante toda la primera parte y continuó en la misma línea en la segunda. Se resistió. El Fuenlabrada asustaba cuando los granates cometían el mínimo error, pero las oportunidades llegaban casi siempre en los pies de los de casa.
El partido comenzó poniendo a los de Antonio Fernández en aprietos con un error de coordinación de la defensa que dejó al insistente Fer Ruiz solo ante Cacharrón. Frenó ese primer traspiés de los granates, teniendo en cuenta que en la siguiente jugada, tendrían la réplica los locales con un centro de Seoane a Rufo que no llegó por milímetros.
Tras esos primeros minutos de dominio del Fuenlabrada, el Pontevedra CF empezó a sentirse cómodo en el campo haciéndose con el control del balón. Un disparo de Rubio desde el pico del área a punto estuvo de convertirse en el primero de la tarde. Se sentían cada vez más cómodos, pero los goles no llegaban y las intenciones morían en la orilla. Ni en jugada combinada ni a balón parado. Borja Domínguez lo intentó con una falta lejana que no supuso mucho problema para Dani Hernández, que aunque se le escapó de las manos no encontró a ningún granate para empujarlo al fondo de la red.
Los equipos llegaron al ecuador del partido con un empate sin goles, pero con suficientes oportunidades por parte del Pontevedra CF, que solo concedió opciones al Fuenlabrada cuando erraba. No los dejó sentirse cómodos.
Tras pasar por el túnel de vestuarios, ambos equipos metieron una marcha más al partido. El empate parecía no valerle a ninguno de los dos. El conjunto madrileño necesitaba su primera victoria a domicilio, mientras los de Antonio Fernández querían seguir mostrando su hegemonía en casa. A medida que fue avanzando la segunda parte, esa necesidad de puntuar empezaba a ser ya acuciante. Álex González y Ángel Bastos se hicieron dueños de la banda izquierda y desde su lado se generaron varias ocasiones buscando a Rufo, que ayer logró la primera titularidad en Pasarón, en la línea de gol.
El susto llegaría tras un error defensivo de Churre que dejó el balón suelto y en un intento de despejar de Cacharrón se topó con Fer Ruiz que no desaprovechó la oportunidad. Estaba prácticamente solo a puerta vacía sobre la línea de fondo y sin ángulo golpeó el balón al palo. Fue casi la única ocasión clara que tuvo el Fuenlabrada en esta segunda parte, donde el Pontevedra CF se acercó con insistencia a la portería de Hernández. Una, dos, tres y hasta media docena de veces, la grada se levantó de sus asientos al ver las ocasiones que se desvanecían en el área pequeña. Un disparo de Brais Abelenda tras pase de Rubio que obligó a Hernández a sacar la pierna y desviar la trayectoria del balón fue la oportunidad más clara del partido junto a un centro de Álex al que Charles solo alcanzó a tocar. Viendo el riesgo que estaban empezando a correr, el Fuenlabrada se cerró atrás con tres centrales y contó los minutos hasta el final. El empate parecía el mejor de los resultados viendo la insistencia granate y lo difícil que estaba el campo después de una semana de lluvias.
El cansancio ya pasaba factura a ambos equipos y el partido se murió en el medio del campo dando por válido el empate.