El nuevo ciclo dual de Estética en Pontevedra: amplia formación práctica en hoteles y «spa»

Cristina Barral Diéguez
cristina barral PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

Alumnas que cursan el nuevo ciclo dual de Estética Integral e Benestar en el IES Frei Martín Sarmiento de Pontevedra, con dos de sus profesoras (con bata blanca)
Alumnas que cursan el nuevo ciclo dual de Estética Integral e Benestar en el IES Frei Martín Sarmiento de Pontevedra, con dos de sus profesoras (con bata blanca) Ramón Leiro

El IES Frei Martín Sarmiento de la ciudad estrena con un perfil variado de alumnas esta modalidad

03 nov 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

El IES Frei Martín Sarmiento de Pontevedra estrena este curso su primer ciclo de FP dual, esa modalidad de formación profesional que combina el aprendizaje en el aula con prácticas remuneradas en empresas del sector. Se trata del ciclo superior de Estética Integral e Benestar, que también se ofrece desde hace años en la modalidad ordinaria. Tras dos meses de clase, es momento para valorar cómo marcha.

Martina Cordido, profesora y tutora, explica que se cubrieron las 12 plazas que se ofertaban en el ciclo dual de Estética Integral e Benestar, aunque al final hubo una baja de una alumna que, por motivos personales, no llegó a empezar. Su puesto ya no se pudo cubrir, a pesar de que quedó gente fuera. De las siete empresas colaboradoras para las prácticas, una se dio de baja —el Hotel Spa Atlántico, de O Grove—, pero otra asumió dos plazas en lugar de una —el Hotel Spa Norat, también de O Grove—.

En el caso del IES Frei Martín Sarmiento fue la Consellería de Educación quien en su día propuso la incorporación de un ciclo dual, modalidad que en Pontevedra ya ofrecen en otras familias profesionales el CIFP Carlos Oroza o el IES Luís Seoane. «Aceptaramos antes do covid e o ano pasado retomouse xa moi enriba da data», expone la docente. Por lo que hubo que apurar los trámites burocráticos y los contactos con las empresas.

Desde el centro indican que tanto el ciclo ordinario de Estética Integral e Benestar como el dual tienen demanda, con salidas profesionales en centros de estética, hoteles y balnearios, principalmente. «O ordinario está a tope sempre e a inserción oscila entre o 30-40 %. Algúns alumnos quedan onde fan as prácticas», señala Martina Cordido.

En el ciclo dual las estudiantes acuden al instituto de septiembre a marzo y a la empresa, de abril a agosto. El 1 de abril empezarán esas prácticas, que concluirán el 31 de agosto. Estarán de alta en la Seguridad Social, percibirán una remuneración de 500 euros al mes y tendrán su mes de vacaciones repartido a lo largo del año. El ciclo superior son dos años. Al margen de que hay más prácticas, ¿en que se diferencia el ciclo dual del ordinario? Martina Cordido alude a un perfil más variado de las alumnas, entre otros aspectos. «Inicialmente os contidos non difiren moito, quítanse horas teóricas. É diferente en que é un grupo pequeno con clases de tarde».

A esa relación más directa y estrecha profesor-estudiante aluden dos alumnas matriculadas en el ciclo dual. Tamara Silva, de Poio y de 22 años, ya había cursado el ciclo medio de Estética en el mismo centro y se enteró por Instagram de que se iba a implantar el dual. «Me matriculé por probar», cuenta. Esta joven dice que el hecho de que las prácticas sean remuneradas «ayuda», pero para ella lo más importante es que conlleva «más prácticas que un ciclo ordinario y un contacto directo con los clientes». El 1 de abril le espera el Gran Hotel Nagari de Vigo: «Tengo muchas ganas de empezar».

Afincada en Pontevedra, Renata Melo, natural de Brasil y de 24 años, compagina su trabajo cuidando a una señora con el ciclo dual. En su caso, no tenía conocimientos de estética, pero siempre le había gustado este campo, a pesar de que inició un grado en Ingeniería Eléctrica en la UVigo. «La carrera era muy exigente y al trabajar era complicado», relata. La carga de prácticas del ciclo le interesa a efectos de currículo, «ya que siempre piden experiencia». De momento, el ciclo cumple sus expectativas y destaca la relación «muy estrecha» con los docentes y la acogida de sus compañeras. Hará sus prácticas en el hotel A Quinta da Auga, en Santiago. «Estoy ilusionada, me gusta el sitio y creo que es ideal para aprender», comenta.