Un mes de liga: ¿el peor del Pontevedra CF en una década?

Nieves D. Amil
nieves d. amil PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

Martina Miser

Las expectativas previas empañan un comienzo en descenso

06 oct 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

El día a día del Pontevedra CF es como el cuento de la lechera, hace planes que después se quedan en nada. Antes de arrancar la competición se fija siempre unos objetivos ambiciosos que en pocas jornadas parecen tan solo pretenciosos. El equipo que se diseñó sobre el papel con la meta del ascenso como obligación está, tras un mes de competición, en décimo quinto puesto con tan solo cuatro puntos. Cuatro empates y una derrota es el balance de cinco jornadas de liga que inquietan tanto a los aficionados, como a la directiva (que el pasado domingo mostró su tensión en el palco), y al vestuario. Antes del partido contra el Arenteiro, Ángel Rodríguez, no negaba que se hubiesen vivido situaciones de tensión tras la anterior empate contra el Bergantiños. «La plantilla está fenomenal, pero los encontronazos los va a haber siempre que sea un equipo ganador. Hay quien lo puede entender como un encontronazo, pero yo no. Para mí no ha pasado nada», apuntaba antes de tener que remontar un 0-2 ante el Arenteiro. En ese sentido uno de los hombres fuertes del equipo, Churre, recalcó el pasado domingo en Pasarón que «hay que ser positivo» y cerró filas con el míster. Defendió su idea de juego, aunque luego sobre el terreno acabe haciendo aguas.

En los últimos diez años solo ha habido un inicio de liga peor que el actual, el de la temporada 2017-18, cuando perdieron cuatro de los cinco primeros encuentros y empataron el otro. Empezaron mal y acabaron igual, logrando la permanencia en el último partido a domicilio ante el Atlético de Madrid B.

El año pasado, sin embargo, la situación acabó tremendamente crítica después de un inicio liguero fulgurante con tres victorias y dos empates. Peleó otra vez la salvación en el último partido con Luisito en el banquillo. El Pontevedra CF está más acostumbrado a empezar fuerte el año, como en las temporadas 2011-12, 2013-14, que sumaron cuatro victorias y un empate en tan solo un mes, que a esto.

Esta temporada todavía queda tiempo para revertir la situación, pero los pontevedreses deben apuntalar muchas deficiencias en el juego para no seguir eso de «quien mal empieza mal acaba». La primera son los despistes defensivos que padecen en este inicio de liga. Está siendo fácil marcarles. Ángel Rodríguez reconoce que «lo poco que nos equivocamos, nos penaliza». Es, junto al Móstoles, Palencia Cristo, UC Ceares y Marino Luanco, el equipo más goleado de la categoría, con siete tantos encajados. La debilidad defensiva les está pasando factura al equipo granate, que ha encajado tres de ellos en los últimos diez minutos de partido.

Los dos goles de Charles el domingo pasado ayudaron a calmar unos ánimos demasiado caldeados en la grada y en el palco. El delantero brasileño salvó un punto en el que el partido tenía que ser una victoria obligada y la salida de Romay y Álex González, en el banquillo la primera parte, ayudaron a apaciguar los nervios. Ahora vuelven a fijarse este objetivo ante el Marino de Luanco del próximo domingo. Un triunfo sobre el conjunto asturiano cambiaría mucho la percepción granate. Sumar tres puntos podría empujarlo fuera de la zona de peligro. Está a solo cuatro puntos de unirse a los puestos nobles de la tabla.