Brotes y cuidado en el colegio
Anxo sufre brotes con cierta frecuencia. A veces basta un simple cambio de temperatura. Con las medidas anticovid, también tienen que extremar las precauciones y aunque en el colegio él no usa gel hidroalcohólico -se lava con agua y jabón- sí tuvo una reacción en las manos por los productos de limpieza empleados para desinfectar las mesas.
Conseguir que derivaran al menor al área sanitaria de Pontevedra desde la de Vigo para recibir el tratamiento tampoco fue fácil. Esta familia dice que las Administraciones y la burocracia «en vez de facilitarte las cosas son muros no infranqueables, pero a los que hay que abordar cargados de paciencia». Hoy están encantados con las profesionales que llevan a Anxo y quieren agradecérselo. «Solo podemos tener palabras de agradecimiento a Ana Batalla, que nos ha hecho un salvoconducto para que nos atiendan con celeridad en un área que no es la nuestra en estos tiempos de covid. A Ángela Hernández, que es la doctora que lleva la consulta multidisciplinar del Niño Jesús, donde acudimos en una mañana y nos atienden cuatro especialistas, y a la farmacia de Montecelo, donde Carmela Dávila siempre está para nosotros».