Tres partidos para que den las cuentas

Nieves D. Amil
NIEVES D. AMIL PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

Ramón Leiro

El Pontevedra hace números para intentar el asalto y quedar entre los seis primeros

24 feb 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Al Pontevedra le quedan tres partidos para el desenlace de una liga que empezó con más expectativas que las que tiene sobre la mesa a las puertas de marzo. Tras un arranque espectacular bajo la batuta de Jesús Ramos, comenzó a perder fuelle después de perder el pasado 13 de diciembre por una sonada goleada en Coruxo. El equipo no fue capaz de remontar ese bache hasta la llegada de Luisito el pasado 8 de febrero. En estas tres jornadas bajo su batuta el equipo empató, ganó y perdió. La última derrota ante el Compos es un jarro de agua fría en un esprint final en el que el margen de error es cada vez más pequeño.

Con una semana de descanso por delante y varios equipos de la categoría con algunos partidos menos -Zamora, Celta B, Racing y Guijuelo- la victoria en las próximas tres jornadas es obligada. La primera parada será en Riazor. Ahí se jugará el 7 de marzo y unos y otros saben que en esos 90 minutos se va media liga. Los de Luisito saben que un nuevo tropiezo en Riazor los condena al pozo, mientras que un triunfo los saca de él. Tras el partido contra los granates, ya solo le restarían dos más de la zona baja. Primero recibirán al Coruxo en Pasarón el 14 de marzo y cerrarán la liga en Guijuelo el 21 de marzo. Ambos equipos están por detrás de los granates, de ahí la importancia de ganar al equipo de Rubén de la Barrera para poder meterse entre el cuarto y sexto clasificado. Los que queden en esas tres posiciones jugarán a seis partidos de ida y vuelta con los que acaben en las mismas posiciones del subgrupo B. El único premio es clasificarse para la Primera Federación, una nueva categoría que quedará entre la Segunda División y la Segunda Federación, lo equivalente a la actual Segunda B, pero con equipos, a priori, de menor nivel.

Las cuentas son complicadas para el Pontevedra. Aunque las matemáticas aún no lo confirman, es prácticamente imposible que puedan aspirar a finalizar la primera fase en los tres primeros puestos. Quedar en este grupo le aseguraría la Primera Federación del próximo año e incluso poder pelear por un puesto en Segunda. Perdonaron demasiado como para que esto pueda ser real. Y los resultados le acortan las expectativas para quedar entre el tercero y el sexto. Solo tienen una manera de conseguirlo y pasa por ganar los tres partidos que tienen por delante. Parece complicado, pero no imposible. Si se diesen otros resultados, el Pontevedra dependería de lo que hacen sus rivales más inmediatos, de ahí que el duelo con el Dépor sea crucial para las aspiraciones granates.

Los tres primeros puestos están en estos momentos en manos del Unionistas (26 puntos), el Zamora (25) y Celta B (24), estos dos últimos con un partido menos cada uno. El primer puesto parece casi inamovible. El equipo salmantino tiene por delante el Guijuelo, Salamanca y Racing de Ferrol. Pero la fiesta empieza a partir del tercer clasificado. El Compos, en cuarto lugar, está a cinco puntos del Pontevedra, seguido del Racing y el Dépor, con 20 cada uno y a solo dos del Pontevedra. A los coruñeses les queda todavía jugar con el Zamora y el Celta B, que necesitan la victoria para consolidarse en el podio clasificatorio. Por otra parte, al Racing tiene el mismo calendario que los granates, salvo que en lugar de jugar con el Dépor lo harán con el Unionistas. Esta tarde disputarán el partido aplazado con el Celta B, donde una victoria de los ferrolanos le igualaría al Compos en la cuarta plaza.

El Pontevedra todavía tiene margen de salvarse, pero no puede conceder nada. Gestionar la presión será su mayor virtud en los tres encuentros que tiene por delante. En el peor de los casos se quedaría por debajo de la sexta posición -donde está ahora- y pasaría al grupo que pelearía por la permanencia. Los tres primeros se quedarían en la Segunda Federación y el resto descendería a la Tercera División, que en la práctica sería como caer de golpe dos categorías.

El club está pendiente estos días de la evolución de Luisito, pero tendrá casi dos semanas por delante para intentar que el equipo remonte el vuelo y cumpla con el encargo de Lupe Murillo cuando lo fichó.