El árbitro Alejandro Muñiz: «Ahora escuchamos muchas acciones que antes pasaban desapercibidas»

Á. dávila

PONTEVEDRA CIUDAD

A sus 29 años, el colegiado gallego ya tiene un Premio Guruceta como el mejor árbito de la temporada

10 ene 2021 . Actualizado a las 22:46 h.

Al colegiado de Pontevedra, Alejandro Muñiz, todo le está marchando sobre ruedas tras su salto al fútbol profesional. Apenas tiene 29 años, pero ya puede presumir de contar con reconocimiento por su buen trabajo al recibir a finales del pasado año el premio Guruceta que le reconoce como el mejor árbitro de Segunda División durante la temporada pasada. Esa campaña 19-20 fue precisamente la de su debut en LFP, por lo que el lerezano comienza pisando fuerte y confirmando su candidatura a estar en un futuro no muy lejano dirigiendo partidos de la máxima categoría.

El Pontevedrés, que dirigió su último partido el pasado día de Reyes en el cruce de copa entre el Castellón y el Tenerife, lleva ya dirigidos una treintena de encuentros en la categoría de plata del fútbol nacional.

- ¿Qué supone para usted recibir el reconocimiento por su trabajo en la temporada en la que debuta en categoría profesional?

-Pues es un refuerzo positivo que anima a seguir trabajando en la misma línea. Los árbitros rara vez recibimos reconocimientos, así que no queda más que agradecerlo y seguir adelante. La temporada de debut ya pasó, ahora hay que centrarse en la segunda.

A veces se utiliza el término “tarjetero” como forma de menospreciar a un colegiado, pero usted recibe el galardón siendo el árbitro con más expulsiones de la temporada pasada. Creo que nunca me he caracterizado por ello, al final las expulsiones por acontecimientos del juego son algo circunstancial que no depende de nosotros, como los penaltis, pueden no darse en muchos partidos o producirse varios el mismo día, simplemente ocurren. Al final tienes que buscar acertar la jugada en cuestión y no pararte a pensar en las estadísticas.

-¿Cómo llega al mundo del arbitraje?

-Pues por casualidades, comencé con 15 años con unos compañeros de instituto, uno fue influyendo en otro hasta que finalmente nos apuntamos un grupito considerable. Muchos seguimos a día de hoy, 14 años después, con un montón de anécdotas y experiencias vividas, esperando que sean muchas más.

-¿Cuáles son las diferencias más grandes, VAR al margen, que uno se encuentra cuando da el salto al arbitraje en categoría profesional?

-La mayor diferencia sin duda es la velocidad de juego. Te acabas adaptando a apreciar muchas acciones que ocurren a gran velocidad, con la consecuente dificultad que ello entraña. Ese salto en la velocidad también es muy importante para los árbitros asistentes, que son auténticos especialistas del fuera de juego con una efectividad que asombra. La condición física y la colocación son fundamentales.

-¿Su forma de trabajar se ha visto modificada de alguna forma debido a la nueva situación por la pandemia y a los protocolos Covid? ¿Cómo es el arbitraje post-Covid?

-Llevamos ya muchos meses de esta nueva realidad, que esperamos que pronto sea un mal recuerdo. El trabajo que hay detrás del telón ha cambiado mucho, entrenamientos en solitario y trabajo teórico a distancia. El gran cambio en cuanto a los partidos evidentemente es la ausencia de público y las medidas de seguridad, ahora en el campo se escuchan muchas más acciones que antes pasaban desapercibidas.

-Es todavía un árbitro muy joven ¿Cuáles son sus expectativas para el futuro?

-Es algo en lo que uno intenta no pensar, simplemente se trabaja día a día con el objetivo de la mejora continua y que venga lo que tenga que venir. Trato de disfrutar de lo que hago cada día, ya que cuesta mucho trabajo llegar aquí, es todo un privilegio y un orgullo.

-¿Tiene algún referente?

-Multitud de ellos, en nuestro país tenemos grandísimos árbitros que son referentes a nivel internacional. Uno siempre intenta detectar esas herramientas que los hace especiales, interiorizarlo y tratar de hacerlo propio. De uno te fijarás en su control de partido, de otro su colocación, su autoridad… difícil quedarse con uno solo.

-La figura del árbitro se ha mediatizado en los últimos años con referentes del silbato como Rafa Guerrero o Iturralde González dando el salto a los medios de comunicación masivos. ¿Se imagina en un futuro en una posición similar o no le gustan los focos?

-No me he parado a pensarlo, la verdad no me veo. Acabo de llegar y como he dicho trato de disfrutar el momento. Ojalá tenga primero la exitosa y larga trayectoria de esos compañeros, a partir de ahí ya se verá.

-En Galicia se está hablando de reanudar las competiciones a partir de preferente el mes que viene ¿qué le parece?

-La verdad que no estoy muy al tanto de los protocolos y los pasos a seguir en esas categorías. Si las autoridades así lo han establecido es que se puede cumplir con las medidas de seguridad oportunas.

-Muchos equipos en Galicia están optando por renunciar a inscribirse por responsabilidad y por miedo a contagios. ¿Cree que esto también puede pasar en el colectivo arbitral?

-A los compañeros con los que he coincidido recientemente la verdad es que los veo muy motivados y con ganas de empezar, pero cada persona evidentemente tendrá que decidir y actuar en consecuencia.

-Usted es pontevedrés y actualmente referencia para muchos árbitros de su comité territorial. ¿Qué nivel de arbitraje tenemos en la zona?

-Tanto a nivel local como a nivel autonómico tenemos gran nivel y la gente viene empujando fuerte, veo muchos compañeros muy jóvenes y con mucho potencial. Trataré de ayudar en lo que pueda, al igual que hicieron en su día conmigo, al final es una profesión en la que la experiencia es fundamental.

-¿Qué consejo le daría a todos esos compañeros de profesión que, como usted, empezaron de adolescentes y que sueñan con alcanzar el fútbol profesional?

-Que disfruten de cada categoría por la que pasen, es un camino largo en el que tomárselo en serio con constante trabajo y esfuerzo es totalmente compatible con disfrutar del deporte que practicas. Muy importante también es saber escuchar y dejarse aconsejar, hace que la evolución sea más rápida.