Siguiendo con las tradiciones, el Pontevedra no será menos esta campaña y volverá a acudir al mercado de fichajes en enero para poder dar más empaque a una plantilla que por lo de ahora está sacando buenos resultados pero que quizás se mostrase como algo corta durante este primer cuarto de liga.
Jesús Ramos solo ha agotado los cinco cambios que tiene permitidos durante un partido en esta campaña; la derrota ante el Coruxo con la que cerraron el año 2020 en liga. Al corto plantel se han unido problemas siempre indeseados en forma de lesiones, algo habitual desde hace años en un Pontevedra que acumula ya prácticamente un lustro de mala suerte en cuanto a bajas de larga duración cada temporada. Las ausencias de Romay, para toda la temporada, y Adrián Cruz para aproximadamente las próximas siete semanas, obligarán de nuevo a Roberto Feáns a acudir a un mercado en el que siempre ha demostrado moverse como pez en el agua.
Las carencias este año son claras y el Pontevedra buscará un mediocentro de garantías para darle a Jesús Ramos una alternativa en la zona de creación toda vez que el técnico pontevedrés ha pasado de tener dobladas las posiciones a quedarse únicamente con dos futbolistas para dos puestos en la zona medular.
La dirección deportiva granate ya se ha puesto manos a la obra en la búsqueda de ese mirlo blanco que le de un salto de calidad al equipo por el centro y que complemente a Borja y a Imanol, junto a Cruz cuando se recupere, en el doble pivote. En ese sentido, Roberto Feáns está buscando futbolistas de contrastada y dilatada experiencia que sirvan ya desde el día uno para entrar en dinámica y que sigan en la línea de lo que es la calidad de la actual plantilla. El nombre de Borja Domínguez, actualmente en la plantilla del CD Lugo, ha vuelto a sonar con fuerza por las oficinas de Pasarón pero no es el único futbolistas de categoría superior que actualmente está en la lista de futuribles que maneja el Pontevedra.
Con el apremiante refuerzo del mediocentro resuelto, el club valorará la posibilidad de realizar algún otro movimiento en virtud de si se dan o no salidas en el equipo.