Verducido clama contra las ratios para poder seguir con su proyecto educativo

Cristina Barral Diéguez
cristina barral PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

Capotillo

Padres y vecinos se concentraron para rechazar el cierre de la unidad de primaria

25 jul 2020 . Actualizado a las 11:19 h.

Al igual que hicieran el pasado verano, madres, padres y vecinos de Verducido, en Pontevedra, se concentraron ayer por la tarde ante la escuela infantil de la parroquia para rechazar el cierre del aula de primaria para el próximo curso. En el 2019 pelearon para que no se clausurara un aula de infantil, y ahora toca defender la de primaria. Para esta unidad se han matriculado cuatro niños.

Los convocantes sostienen que la parroquia no puede permitir que Educación cierre esa unidad de primaria, «xa que sería a condena da nosa escola». En la concentración de ayer, apoyada por la comunidad educativa de Verducido pero también por otros colectivos vecinales y deportivos, explicaron que solicitan a la Xunta que vuelva a apoyar al centro y su «reconocido proyecto transformador y de innovación educativa». «Hay fundadas razones y de sentido común para que Verducido siga adelante con su proyecto, del cual la unidad de primaria es una parte fundamental», se dice en el comunicado que leyó Luis Rey, padre de dos alumnos afectados.

Baja ratio

Las familias exponen que la baja ratio ya se dio el curso 2013/2014 y entonces no se cerró primaria. «Sería un error y la pérdida de un ejemplo y empuje innovador para la comunidad gallega en su conjunto. Una baja ratio coyuntural, además en estas circunstancias, no puede responderse con una medida estructural de cierre», recalcan, y añaden que la Administración debe considerar que la ratio es un criterio más, pero no toda la ecuación para decidir el cierre de un centro educativo o parte de él.

Los convocantes hacen hincapié en que el proyecto educativo «innovador y transformador» de Verducido se ve facilitado por su condición de escuela unitaria y rural. «Hemos consolidado una escuela respetuosa, de atención a la diversidad y las singularidades de cada niño», subrayan.

Toda la comunidad educativa y la parroquia entienden que la pervivencia de primaria es fundamental para el futuro. «La neurociencia -dicen- nos indica en educación la importancia del desarrollo del niño en su etapa hasta los 7 años, lo que avala la inclusión en un mismo proyecto de infantil y primaria». Por este y otros motivos aluden a que la escuela pública de Verducido es valorada por padres de niños con necesidades especiales y es por ello que familias de la ciudad llevan a sus niños a este centro.

Las familias reiteran que los niños tienen derechos y deben respetarse. «Las normas educativas no se reducen a la ratio, sino a derechos, valores, principios y proyectos sociopolíticos de impulso a la mejora en la educación». Inciden en que la escuela de Verducido sigue la senda abierta por otros colegios innovadores y transformadores, que les han comunicado su apoyo. En concreto, citan el respaldo de O Pelouro, en Tui. Los padres se refieren también a los niños a los que una semana antes de finalizar julio se les pretende anular la matrícula. Dicen que recibieron la noticia «de forma intempestiva, sin advertencia previa por parte de la Administración, en este año duro emocional, laboral y educativo del covid-19».

Hasta hablar con Feijoo

Los padres afirman que han enviado escritos a todos los niveles educativos sin respuesta. Y han solicitado poder contactar con la conselleira de Educación, el director xeral de Centros y hasta piden hablar, si fuera necesario, «con el señor Feijoo» -en alusión al reelegido presidente de la Xunta-. Reiteran que no escatimarán esfuerzos por su escuela.