Los sospechosos deberán guardar cuarentena en el penal
06 jun 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Finalmente, y tras una larga comparecencia telemática, la titular del Juzgado de Instrucción número tres de Pontevedra decretó el ingreso en prisión provisional comunicada y sin fianza de dos de los detenidos en la última redada en O Vao de Abaixo. El resto de sospechosos quedaron en libertad con cargos, si bien la totalidad de arrestados en el marco de la operación Desfiladero están investigados por un supuesto delito de tráfico de drogas.
De este modo, los dos encausados fueron conducidos a última hora de la tarde de este jueves hasta la prisión de A Lama. Allí tendrán que permanecer en el módulo de ingresos guardando cuarentena durante catorce días para descartar que no están contagiados por el coronavirus, una medida que aún se mantendrá, según confirmaron desde Instituciones Penitenciarias, una vez se alcance el lunes la fase tres de la desescalada.
La operación Desfiladero se centró, en esta ocasión, en una única chabola del asentamiento marginal de Poio. Los investigadores sitúan en esta infravivienda el punto de venta de droga más activo de O Vao de Abaixo, toda vez que, supuestamente, había centralizado buena parte de las transacciones que diariamente se realizan a raíz de los últimos golpes policiales, los cuales, entre otros éxitos, permitieron descabezar a los que se considera que eran los principales clanes o familias que venían operando en este poblado.
De este modo, el miércoles pasado, medio centenar de agentes de la compañía de la Guardia Civil de Pontevedra, apoyados por personal de la Unidad de Seguridad Ciudadana (USECIC) y del Servicio Cinológico, llevaron a cabo el arresto de cinco personas «implicadas directamente en la operación». Además, fue detenida un sexto individuo que se ocultaba en la chabola al tener tres causas pendientes y que, horas más tarde, quedó en libertad tras comparecer ante el juez que decretó su requisitoria.
Paralelamente, se procedió a la entrada y registro de la vivida, lo que permitió localizar 321 dosis de cocaína, otras cuatro de heroína, nueve móviles y novecientos euros en efectivo, así como diversas joyas. De igual modo, el instituto armado de Pontevedra dio cuenta de la localización de un generador eléctrico que figuraba como robado.