El despegue granate urge para no descolgarse de la cabeza de liga

Nieves D. Amil
nieves d. amil PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

RAMON LEIRO

Sumó solo tres puntos de los 18 posibles al empatar 0-0 por tercera vez

04 feb 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

No solo hace falta mejorar el juego, sino que la pelota cruce la línea de gol para que los resultados acompañen en la segunda vuelta. De los últimos 18 puntos posibles, el Pontevedra solo ha sumado tres al firmar su tercer empate a cero este fin de semana contra el Ibiza. Es un buen resultado teniendo en cuenta la calidad del rival y los anteriores encuentros, pero no es suficiente en el contexto en el que está el equipo. En octava posición y con 31 puntos se ha alejado un poco más de la cuarta plaza después de ver que el Peña Deportiva y el Coruxo cumplieron este domingo en casa. Los de Michel Alonso se meten en la cuarta plaza, con 37 puntos, empatados con el Peña. Y mientras, los granates apuntan maneras en el juego, pero tienen dificultades de cara al gol. Tres tantos en seis partidos.

Con el mercado de invierno ya cerrado, el equipo está preparado para afrontar esta segunda vuelta, como ha dicho Pouso en muchas ocasiones, como uno de los buenos, con dos jugadores casi por posición. Así, el cuadro granate queda con Nacho López y Santi Figueroa, en el lateral derecho; el centro de la defensa para Campillo Jaouad, Churre y Bueso; el lateral izquierdo, para Eneko Zabaleta y Naveira; mientras en el medio del campo pelearán Jesús Berrocal, Sana, Adrián Cruz y más adelantados en la medular José García, Romay o Álex Fernández. Después de la salida frustrada a Polonia de Álvaro Bustos, el Pontevedra lo recuperó ya este domingo.

El extremo derecho lo compartirá con Pedro Vázquez, mientras todo apunta a que Álex González volverá a la posición real por la banda izquierda por detrás de Rufo, Adighibe o José Rivera. Está todavía pendiente de saber qué pasará con el canterano después de que el club lo invitase a buscar una alternativa en el mercado de invierno. Un problema en los términos de la cesión al Arousa lo dejaron en el equipo, pese a la advertencia de la dirección deportiva de que podía cambiarle la ficha para el filial. Pouso ya ha demostrado con hechos su postura al dejarlo fuera por decisión técnica en los últimos partidos. Al entrenador granate se le abre ahora otro problema, Adighibe y Rufo están a una tarjeta de no poder jugar un partido. Y será ahí cuando tenga que recurrir a Rivera o tirar de Martín Diz, como ha hecho en jornadas anteriores. La llegada de Rufo le ha dado en ataque la chispa que le faltaba al equipo después de que el propio entrenador reconociese que el delantero nigeriano todavía estaba en proceso de formación.

La imagen del equipo este domingo mejoró tanto en defensa como en ataque, pero no convirtió en goles las escasas ocasiones. Esta será la primera semana que Carlos Pouso disponga de toda la plantilla (con cuatro caras nuevas) para empezar a trabajar en la remontada en la que se tiene que convertir la segunda vuelta. Tendrá seis días para invertir una racha que está levantando demasiadas dudas cuando menos conviene.