¿Es el Satisfyer el juguete estrella de la Navidad?

Nieves D. Amil
Nieves D. Amil PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

CAPOTILLO

Una tienda pontevedresa tiene más de doscientos en stock y espera nuevos pedidos ante la fuerte demanda en estas fiestas

29 ene 2020 . Actualizado a las 13:50 h.

El bum del Satisfyer no es comparable a nada en los últimos años. Ni a la locura que desató Las sombras de Grey, ni tampoco a la repercusión que tuvo el uso del Panty Vibe, un estimulador de control remoto, que Broncano manejaba a una invitada en La Resistencia. Ahora es otro momento, otra revolución, que ha entrado para hacerse fuerte estas fiestas navideñas después de haberse colado ya en miles de casas. En la boutique erótica El Arca azul de Pontevedra confirman esta revolución. Tienen más de 200 en stock y esperan nuevos pedidos para no dejar a nadie insatisfecho. Y es que cada semana venden solo en Pontevedra cerca de 25 Satisfyer. «Es el producto estrella de estas fiestas», reconoce una de las profesionales de  El Arca Azul, Yesica Lino, que en el centro de Pontevedra recibe clientes en busca de un producto que tiene hasta once tipos distintos y un precio que va desde los 19,90 hasta los 100 euros.del Luxury en promoción, sino el precio sube hasta los 125 «Este precio se mantendrá hasta que agotemos existencias», explica Lino. Al ritmo que van, esa fecha llegará pronto. 

Pero, ¿qué es eso que ha hecho que se convierta en el juguete estrella de la Navidad? Es un juguete erótico que estimula el clítoris sin contacto a través de unas ondas de presión y promete orgasmos en cuestión de minutos. «Masajea con la fuerza de presión del aire», explica Lino y su compañera en El Arca Azul, Eva Fraga, que confirman el aumento de las ventas en las últimas semanas. Pero si todos hacen lo mismo, ¿por qué hay esa diferencia de precio? Los más baratos necesitan pilas, mientras los recargables (a través de USB)  tienen una intensidad algo mayor, además de ser sumergibles, una de las cualidades que lo hacen más interesante para la compradora o el comprador. «En el agua es mucho más intenso», comenta Fraga. Jóvenes, adultos, jubiladas, no hay un segmento de edad muy definido entre las usuarias, aunque las mujeres entre los 20 y los 50 son las usuarias más habituales. Lejos de lo que puedan pensar muchos, los hombres son también clientes habituales. La mayoría regalan el Satisfayer a sus parejas para hacer las relaciones más interesantes y salir de la rutina.

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El 1, 2, Pro 2, Pro Plus, Cuatro couples, Pengun, Deluxe, Travel o G-spot rabbit son algunas de las variedades a las que se suma la opción con vibrador en el Pro 2 y el Pro plus. Todos ellos pueden llevar a la mujer al orgasmo en dos minutos, al menos eso es lo que comentan sus usuarias. En definitiva un abanico enorme para la satisfacción, que ha revolucionado el mercado erótico de España y amenaza con ser el regalo estrella de Papá Noel o los Reyes Magos.

No todo es Satisfyer

En el Arca Azul informan a los clientes de todas las alternativas que hay, aunque muchas solo tren la cabeza el Pro 2, el modelo que ha dado la vuelta al mundo en imágenes. Porque no todo es Satisfayer en el mercado.Hay placer en más juguetes. Existe otra marca que lleva tiempo trabajando y tiene tantas seguidoras como el Satisfayer. Al menos en Pontevedra. «El de la marca Lelo tiene una función igual, pero usa ondas sónicas, mediante válvulas que generan ondas en forma de pulsaciones que estimula la parte interna y externa del clítoris», explica Yesica Lino, sobre un producto que se comercializa muy bien y lleva más años en el mercado.

A los succionadores de clítoris, en el Arca azul aseguran que hay muchos juguetes erótico que tienen cada vez más tirón. Al ya popular Panty Vibe, de Liede, que se maneja la intensidad por control remoto y tiene un precio que ronda los 66 euros, está una versión más sofisticada que te permite manejar el juguete desde la otra parte del planeta. Sí, han leído bien, desde la otra parte del mundo se maneja a través de la voz, o desde el móvil o smartwatch. «Incluso con una canción se puede hacer que le vibre a tu pareja, aunque estés en otro país», explican Yesica Lino y Eva Fraga. Eso sí, el precio sube ya a los 154 euros.