Quejas en las urgencias extrahospitalarias por falta de médicos en los PAC de A Parda, Baltar y Caldas

Cristina Barral Diéguez
c. barral PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

08 oct 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Fue la tónica del pasado verano en el área sanitaria de Pontevedra y O Salnés y la situación se mantiene en el arranque del otoño. La falta de médicos en las urgencias extrahospitalarias motivó este lunes nuevas quejas del personal por la situación vivida el fin de semana. Las carencias afectaron, según señaló la enfermera María Torre Almón, a los puntos de atención continuada (PAC) de A Parda, en Pontevedra, Baltar, en Portonovo (Sanxenxo), y Caldas de Reis.

Según su relato, en el caso de A Parda, se empezó conociendo al inicio del fin de semana que es posible que faltara algún facultativo. Algo que se confirmó en la tarde del domingo, cuando tenía que haber tres médicos y hubo dos. Se logró tener a los dos facultativos estipulados la noche del sábado porque uno de ellos, al conocer que no se cubriría su ausencia esa noche -tras pedir permiso y ser concedido-, decidió no dejar sola a su compañera para atender a toda la población del área de Pontevedra y municipios próximos.

Acumulación de horas

En Baltar, para la mañana del domingo tuvieron que utilizar, cuenta el personal, a la médico que trabajó las 17 horas del sábado y que a las 8 se iría a su casa. «En esta ocasión lo pudo hacer a las 15 horas», afirman. Y en Caldas de Reis al comienzo de la tarde del sábado se avisa al directivo de guardia de que hay un solo facultativo en el PAC. El directivo les traslada que el segundo médico llegará un poco tarde -algo que suele pasar porque casi siempre viene de pasar consulta en otro centro de salud durante la mañana y tiene que comer y desplazarse-. Pero, según los trabajadores, pasó la tarde y no llegó, verificando desde la dirección de guardia que no habría ese segundo facultativo.

No colaborar más

Tras estos hechos, que no son nuevos, el personal de las urgencias extrahospitalarias del área alude a que algunos profesionales de los PAC ya no están dispuestos a colaborar más con la Administración. La medida afecta de momento a médicos. «Una vez más es el personal sanitario que, prescindiendo de sus descansos y permisos, vela porque el número de recursos humanos que atiende a la población se aproxime al correcto», afirman. Pero añaden que este proceder puede cambiar: «Son ya muchos años viviendo esta situación, por eso muchos de ellos han decidido no colaborar más mientras no cambie la situación. Creen que la única forma es no seguir cediendo, ya que haciéndolo solo se ayuda a perpetuar el problema», apuntó la enfermera María Torre Almón.