La artista que amaba la moda

Manuel Blanco REDACCIÓN / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

cedida

La viguesa Tamara Valverde, licenciada en Bellas Artes, lanza su propia firma textil después de 12 años de trayectoria profesional en el sector

15 sep 2019 . Actualizado a las 05:08 h.

A Tamara Valverde (Nigrán, 1983) siempre le fascinó la moda. Cuando era una niña, se quedaba absorta disfrutando de los reportajes fotográficos de las grandes revistas del sector. «Me recuerdo de toda la vida diseñando, siempre me atrajo este mundo», evoca. La vida, tantas veces imprevisible, la llevó por otros derroteros académicos, aunque el gusanillo permanecía dentro. Estudió Bellas Artes en Pontevedra hasta que volvió a emerger: «Cuando hice la carrera quedó ahí a un lado -explica-, pero la vocación seguía latente y cuando crearon en la misma facultad en la que estaba los estudios de diseño, pues ahí floreció de nuevo». Aquella pasión que siempre la ha acompañado acaba de convertirse en una empresa textil y en su primera colección de ropa infantil, que ha bautizado con el sugerente nombre de Anduriñas.

En realidad, su decisión de emprender es la consecuencia de una trayectoria profesional muy vinculada al universo de la moda. En los últimos 12 años ha trabajado en la industria en puestos relacionados con el diseño, el patronaje y la confección tanto en proyectos propios como para otras marcas, además de participar en algunos de los certámenes de moda más prestigiosos de la comunidad.

La idea de impulsar su propia marca le había rondado la cabeza desde hacía tiempo y el espaldarazo definitivo lo recibió en Cataluña. «Fui allí a hacer un curso. Tenía la colección ya diseñada y como vi que a mucha gente le gustaba la propuesta, me decidí a poner en marcha la empresa. Trabajé tres años en los diseños y patronajes, el año pasado fuimos a la Feria Internacional de la Moda Infantil y Juvenil de Madrid y, a raíz de la gran aceptación que tuvo la colección, entendimos que era el momento de lanzarla», detalla.

Anduriñas es una colección de trece prendas dirigidas a niños de entre 3 y 11 años. La segunda está a punto de ver la luz -«la tenemos en el horno», anuncia- y mantiene el espíritu de la primera, una apuesta por la moda sostenible, por los tejidos 100 % algodón y por ese segmento de mercado que propone una industria sostenible e incardinada con la sensibilidad ecológica de esta era, por ese perfil de consumidor que es proactivo con las empresas que se alinean con estos principios. «Este cambio es necesario, porque la cadena de la industria textil es insostenible. Es necesario porque el impacto medioambiental es muy elevado», argumenta.

En el marco de esta filosofía se enmarca también otra de las señas de identidad de la firma, su apuesta por los talleres y suministradores de materias primas radicados en España, muy especialmente los de proximidad. «El corte y la confección de las prendas lo hacemos desde aquí, pero si necesitamos ayuda recurrimos a talleres cercanos y todos nuestros proveedores de tejidos son españoles y trabajan con esta misma política de respecto medioambiental y de proximidad», aclara la emprendedora viguesa.

Tienda «online»

Por lo que respecta a los canales de venta, inicialmente ha apostado por crear una tienda online, habida cuenta de las mayores facilidades que le plantea esta vía en esta primera fase de vida de su empresa, pero ya ha abierto la puerta para desembarcar en espacios físicos, allí donde el cliente puede tocar y probar sus creaciones. «Me decidí por la tienda online porque es más sencillo, lo admito, aunque es necesaria una inversión grande en márketing para que te conozcan, pero sí que estamos pensando ya en el soporte físico. Hay tiendas que se han interesado por nuestra colección y sí que vamos a tener en cuenta esta posibilidad», concluye.