El dezano Santiago Sánchez peleará hoy por el bronce

C. Pereiro

PONTEVEDRA CIUDAD

CAPOTILLO

El Europeo Júnior de Lucha se despide esta tarde en el pabellón municipal, con los países del Este dominando el medallero

09 jun 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

El Europeo Júnior de Pontevedra sigue ocupando las instalaciones locales para disfrute de todos los aficionados a la lucha olímpica y, para qué negarlo, más de un curioso que se ha acercado por la zona estos últimos días. Lo cierto es que el ambiente del que está gozando el torneo es envidiable, y el alboroto de las gradas y su espectáculo rivaliza con el que se vive sobre tapices del pabellón de deportes de la Boa Vila.

Así, el campeonato internacional encara su recta final, celebrando este domingo sus últimos combates en forma de finales y su consiguiente reparto de medallas. La jornada del sábado de nuevo estuvo marcada por la espectacularidad y el buen hacer de todos los participantes, en la que no hubo que destacar ni un solo imprevisto o incidente real.

Como era de esperar, los países de Europa del Este sacaron el rodillo, tiraron de talento, fuerza e historia y dominaron a sus competidores. Moldavia, Rusia, Azerbaiyán y Turquía demostraron con creces su increíble nivel en todas las categorías y apartados de la lucha olímpica. Sin apenas contestación, se agenciaron los pases a los medalleros. Suya fue la tarde del sábado.

España solo pudo asistir ayer como mero espectador. Por suerte, aún hay algo de esperanza. Tras el bronce de Victoria Báez, el equipo nacional podría agenciarse otro metal del mismo tipo, aunque habrá que remar contra viento y marea para lograrlo. Santiago Sánchez, del club Keltoi de Vila de Cruces y becado en el CGTD de Pontevedra, tiene opciones de subirse al podio, aunque para ello deberá ganar nada menos que tres combates consecutivos: contra Suecia, Bielorrusia y Rusia. Cabe soñar y, sobre todo, luchar por conseguirlo.

Este domingo, la competición se reanudará a las 16 horas. Una última jornada de emoción y espectáculo que promete ser inolvidable, más aún tras haber dejado claro que la Boa Vila puede funcionar como un perfecto escenario de celebración para este tipo de eventos deportivos también.

España ha tenido un papel discreto en el campeonato, aunque la competencia, huelga decir, era terrible. El conjunto nacional ha sabido aún así ganarse un hueco dentro del torneo y dejado el listón muy alto.