
Cristian Fernández, entrenador del Galaico, hizo el mejor tiempo en el Mundial de Acuatlón y se fija ahora su clasificación para el Campeonato de Europa
01 may 2023 . Actualizado a las 15:36 h.Cristian Fernández era hasta la pasada semana el entrenador de los equipos benjamines del Galaico de natación y triatlón y un nadador profesional. El ITU Multisport pasó por él y dio un giro a una carrera que está ahora en su cénit. El mejor tiempo en los grupos de edad del Mundial de Acuatlón le puso en bandeja una medalla de oro tan aclamada por los suyos como fue la de Gómez Noya y Pablo Dapena por los pontevedreses. «Los niños que entreno nunca me hicieron tanto caso como el día que gané», explica Fernández, que cada tarde acude a la piscina para trabajar con chavales de entre ocho y diez años.
Las mañana son para sus entrenamientos, pero las tardes son para los más pequeños. Lleva ya cinco años entrenando con ellos y lo que empezó hace una veintena de años como una afición se ha convertido en su profesión. No encuentra nada que le reconforte tanto. «Para mí levantarme a las siete de la mañana e ir a nadar no supone un sacrificio», señala Fernández, que junto al Lérez recuerda paso a paso como llegó al oro hace una semana. «La prueba empezó en el agua, yo sé que en la natación tenía opciones, me escapé pronto y logré sacar un minuto al siguiente en la transición», explica Fernández, que hizo el kilómetro a nado en 12 minutos y 43 segundos.
Con la ventaja que llegó a la transición creyó que si hacía una buena carrera pie por el centro podría llegar en el grupo de cabeza. Y así fue, con un tiempo de 15.58 se puso en primer lugar en la meta del CGTD. El oro se iba para su casa y para su club con un tiempo global de 29.55. No solo fue el mejor resultado en el grupo de edad de entre 25 y 29 años, también rompió el marcador en todos los grupos al alcanzar el mejor tiempo. «Cuando crucé la meta estaba súper contento, estaba mi familia, mis amigos y muchos de los niños a los que entreno, fue espectacular, si hubiese sido en otro sitio estaría contento, pero ver aquí a todos, es una pasada», comenta el nadador, que entrena seis días a la semana. Dos horas de piscina, 45 minutos diarias y en jornadas alternas una hora y media de carrera. Este no parar deportivo es solo el punto de partida para continuar compitiendo.
Su próximo objetivo es poder participar en el Campeoanto de Europa en categoría élite. «No tengo ránking en el triatlón y va a ser complicado lograrlo, hay cien plazas, pero tengo puntos del Campeonato de España y gallego», reconoce este nadador pontevedrés, al que la bici no acaba de conquistarle como lo ha hecho el agua o la carrera. Pero como deportista sacrificado reconoce que «lo que haga tengo que hacerlo bien, pero la bici requiere mucho tiempo».
El mejor ejemplo
Cristian Fernández asegura que celebrar estos eventos en la ciudad dan una lección de oro a sus alumnos. «Ven que el esfuerzo y el trabajo tiene premio, se motivan y ven que pueden llegar a competir», subraya este nadador pontevedrés, que participó en el Mundial después de haber hecho tan solo dos pruebas de acuatlón en su carrera. Hace cuatro años cuando se supo que Pontevedra acogería el Multisport se le pasó por la cabeza y lo habló con su entrenador. Se quedó ahí parado, pero a falta de un año para que arrancase ya se puso en serio y empezó a correr. Es sincero. «Tengo cualidades corriendo y nado a diario». La receta imprescindible para el triunfo.
Y si a él le hizo ilusión a sus niños, más. «Los padres me decían que cuando fueron al colegio al día siguiente le decían a sus amigos ‘mi profesor ganó un oro’», comenta un orgulloso Cristian Fernández que, como le pasó a Gómez Noya y Pablo Dapena, ha logrado ser profeta en su tierra. Es solo el comienzo.