El candidato de Vox en Pontevedra: «¿Un muro en Marruecos? Claro, todas las casas tienen puerta»

Carlos Punzón
carlos punzón VIGO / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

Oscar Vázquez

«Las autonomías son el cáncer de España y ante la escasez lo que hay que hacer es centralizar», asegura el general Antonio Budiño

17 abr 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Santiago Abascal le propuso dejar la cúpula militar para ser la cara de Vox en Pontevedra en las generales. Antonio Budiño (Pontevedra, 1955) sigue siendo general de división, ahora en la reserva en servicios especiales. No se considera ni de extrema derecha, ni nacionalista. «¡Soy nacional español y un defensor de la Constitución!», dice con firmeza, como con todas sus demás opiniones. «Los votantes opinarán del PP de Galicia o sobre Feijoo. ¡Allá él!», zanja sobre la política gallega.

-¿Qué mensaje pretende dar Vox fichando a militares?

-Ninguno. Lo mismo que si trajera abogados, catedráticos o jueces. Somos ciudadanos españoles y tenemos el mismo derecho. No le busque tres pies al gato, otros cogieron a un astronauta. Eso sí, los militares estamos para servir a la sociedad, es nuestra finalidad.

-¿Tratan de exaltar el orden?

-Pero si yo soy el que menos manda. He pasado de ser general a ser soldado de infantería en Vox.

-¿Ser militar es ser de derechas?

-En absoluto. Esa es una etiqueta que tenemos. ¿O es que ser español es de derechas? ¿Querer a España es de derechas?

-El CIS señala que el 53 % de los españoles estima que Vox es de ultraderecha.

-Otra etiqueta. Cuando me uno a este proyecto es porque de sus cien medidas de «la España viva» las firmo todas. Querer la unidad de España está en el título preliminar de la Constitución. El respeto a la familia, también... Todo lo que propone lo está, luego Vox se enraíza en la Constitución. Se fundamenta en la indisoluble unidad de la nación española, patria común de todos los españoles. La gente necesita un partido que recuerde la Constitución y si alguien me ve en un extremo, yo que he jurado defenderla, el que está lejos será él.

-¿Cómo encaja en esa visión que se levante un muro en Marruecos; que la política de inmigración sea mucho más rígida, que se recentralice el Estado...?

-¿La Constitución no habla de la integridad territorial? Pues eso es el territorio español y hay que respetarlo. Todos vivimos en casas y todos tenemos puertas. Si yo pretendo defender mis fronteras de forma que la gente acceda a mi casa, a mi nación, de forma ordenada, si para eso tengo que construir un muro, quién puede decir que no es constitucional proteger el territorio y a sus integrantes. No hay contradicción. No es agresivo poner orden en la entrada de inmigrantes. Mis tíos y mis primos no saltaron muros ni lesionaron a fuerzas del orden cuando emigraron a Francia, Suiza o Uruguay. Y el que diga que Vox está en contra de la inmigración, miente. Estamos en contra de la violenta y la descontrolada.

-El Papa no piensa igual.

-Es su opinión ¿Es magnánimo dejar que entren en un país en el que no tienen empleo? Estamos descapitalizando países y favoreciendo que salgan solo quienes pueden pagar a las mafias para ser esclavos en Europa, y le damos unas asistencias sociales que a lo mejor no hay para todos. La gente pide orden y que no pasen con preferencia grupos de subsaharianos cuando vamos al médico.

-¿Se cree eso, de verdad?

-Sí. Es que lo sé. Compartamos en la medida de las posibilidades.

-¿Qué haría Vox con el Estado autonómico?

-Las autonomías son el cáncer de España. Hay que recentralizar en educación, sanidad, seguridad y justicia ya, porque no están funcionando mejor. Ante la escasez, centraliza.

-¿Vox es nacionalista?

-No hay exaltación. Vox es un partido sereno que dice lo que todo el mundo piensa: profundo amor a España e inquebrantable servicio a España. ¿Tengo que pedir perdón por ser nacional español? Lo digo con la boca llena y el pecho henchido: soy español.

-La puesta en escena de Vox no transmite tranquilidad.

-¿Por qué? ¿Porque usamos la bandera? ¿Porque cantamos el novio de la muerte? Vox es un partido de sentido común, damos voz a la gente y son canciones que entonan nuestros soldados.

-Hablando de soldados. ¿Qué ventaja tendría un joven si vuelve la mili como plantea Vox?

-No haría falta implantarla, no se derogó nunca, está congelada. Se puede pensar en una mili-erasmus si hay demanda social para ello, que ya la hay, no como con la Ley de la Memoria Histórica, que no la tenía. ¡Remover lo que ha ocurrido hace 80 años!

-¿No cree que hay familiares que lo demandan?

-No, y Vox propone derogarla ya. ¿Qué ha aportado a los españoles? Nada más que remover, enfrentar a los españoles. Vox es el partido de la vida, el aborto no es un derecho, ni la eutanasia.

-¿Dónde quedará entonces la libertad personal lograda?

-La libertad es personal, pero en cuanto el Estado se meta a decidir quién nace y quién muere, ¡ojito! Abortar es lo fácil. El cuerpo es tuyo, pero la vida que llevas dentro no lo es, mantiene Vox.

-¿Devolvería Meirás? ¿Y qué haría con la tumba del dictador?

-¡No habrá otros problemas en Galicia! Lo de Meirás arréglenlo con los herederos y dejemos a los muertos reposar en paz. Miremos hacia adelante.