
La empresa que fundó en el 2011 junto a dos amigos es uno de los estandartes del ecosistema tecnológico gallego. Con sede en Pontevedra y oficinas en Londres y Chicago, Qbitia tiene ya presencia en las grandes bolsas mundiales
03 mar 2019 . Actualizado a las 05:15 h.En enero pasado, Luis Taboada (Pontevedra, 1980) fue incluido por segundo año consecutivo por el Instituto Choiseul en el top 100 de los ejecutivos jóvenes más influyentes de España. Aparecía en el puesto 51, quince por encima del listado del 2018. Este ascenso imparable es quizás la metáfora que mejor sintetiza la historia de una empresa dedicada al trading algorítmico que, desde Pontevedra, ha llamado la atención de los mercados, pero también de los grandes fondos de venture capital que persiguen al próximo unicornio. Conversador infatigable, culto y empático, no resulta difícil entender por qué el CEO de Qbitia ha generado tanta expectación.
-¿Cómo nace la empresa?
-Hace algunos años, cuando trabajaba como trader para un family office, llegó un momento en que surgió la necesidad de automatizar mi operativa. Ninguna de las soluciones disponibles en el mercado me convencía totalmente. Existían plataformas de trading con funcionalidades específicas, pero ninguna que ofreciese una solución completa que las integrase todas. Entonces pedí ayuda a mis antiguos compañeros de la facultad de Físicas de Santiago Francisco Román y Marcos Suárez para que me echasen una mano y crear un software específico. Así es como arrancamos trabajando los fines de semana desde el salón de nuestras casas. La clave era que este software ayudase a automatizar procesos de trading sin que el usuario tuviera que saber nada de programación. Al comenzar el desarrollo de la plataforma, nos dimos cuenta de que podría ser útil para otros profesionales del sector, que existía un nicho de mercado con potencial comercial internacional. En el 2011, nos decidimos a dar el paso del emprendimiento transformando nuestra idea en la empresa Qbitia.
-Hoy tienen presencia gracias a distintos acuerdos en las principales bolsas internacionales, ¿cuál es el secreto del éxito?
-Creo que detrás del éxito no existen los secretos ni las fórmulas mágicas, aunque tengo claro que hay unos ingredientes que siempre deben estar ahí, al igual que en todas las facetas de la vida, como son el sentido común, el compromiso y el trabajo en equipo, sin olvidar un cierto punto de ambición, de pensar a lo grande desde el principio. En nuestro caso, siempre hemos procurado estar muy abiertos a las demandas y mensajes que nos llegaban de los inversores, de nuestros colaboradores y de nuestros clientes. Nuestra estrategia inicial se ha basado en llegar a un acuerdo con un gran cliente que se convierta en prescriptor, para luego exportar ese modelo y replicarlo con otros clientes. Esta es la estrategia que seguimos con Bolsas y Mercados Españoles, con una colaboración que luego replicamos con otros exchanges y partners internacionales. Y, por otra parte, también hemos sido lo suficientemente flexibles para adaptarnos a los cambios con rapidez. Yo creo que esta es una de las principales ventajas de las startups frente a las grandes compañías, su capacidad de adaptación.
-Explíqueselo a un neófito, ¿a qué se dedica exactamente Qbtia?
-El producto principal de Qbitia es la plataforma de trading algorítmico Qcaid. La mayoría de las personas no saben qué es el trading automático exactamente, aunque sí están familiarizados con instituciones como la bolsa y con la compra y venta de acciones. Pues bien, Qcaid permite diseñar estrategias de inversión en acciones, futuros o divisas sin necesidad de tener conocimientos de programación, lo que constituye su ventaja competitiva. Estas estrategias se ejecutan de manera automática sin que el inversor deba estar pendiente de cuándo comprar o vender en función de los vaivenes de los mercados.
-¿Han desterrado los ceros y unos, los algoritmos en definitiva, la imagen clásica del broker, aquel Gordon Gekko de Wall Street?
-La informática ha revolucionado el mundo del trading al igual que lo ha hecho en otros muchos sectores, y lo seguirá haciendo en los próximos años con la expansión del trading algorítmico. Esa imagen clásica del hombre de finanzas de los años ochenta, popularizada por personajes de ficción como Gordon Gekko o por novelas como La Hoguera de las Vanidades, por muy atractiva que resulte, no tiene mucho que ver con la realidad, y mucho menos ahora con la relevancia que ha adquirido la parte tecnológica en el sector. Hoy en día, en las firmas de Wall Street hay casi el mismo número de programadores e ingenieros informáticos que de financieros. Todas las firmas, sean pequeñas o grandes, están invirtiendo en tecnología y automatización, hasta tal punto que la mayor parte de las transacciones que se ejecutan en el mercado son de corte algorítmico.
-¿Son más fiables que el ser humano?
-Los algoritmos siempre están programados por un ser humano, que fija los parámetros según los cuales deben comportarse. Por lo tanto, la intervención de los profesionales sigue siendo necesaria y el control humano continúa estando ahí. Lo que se elimina es el aspecto psicológico, es decir, la incertidumbre o la ansiedad que puede hacer que un inversor tome la decisión equivocada simplemente por dejarse arrastrar por un pensamiento irracional en un momento dado.
-Pero han causado algunos problemas. El flash crash del 2010 quizás sea el más conocido.
-La microestructura y la liquidez del mercado han mejorado considerablemente con el trading algorítmico. Esto no significa que, en ocasiones excepcionales, un algoritmo mal programado no pueda desencadenar órdenes masivas que afecten a otros algoritmos y provoquen caídas del mercado, hasta el momento en que se rectifica. Pero esto es similar a las reacciones en cadena que en su día provocaron los humanos. Y no hay que olvidar que el trading algorítmico ha traído consigo una democratización del trading, permitiendo el acceso a los inversores particulares. Precisamente, el año pasado lanzamos Qcaid iSystems Edition, una versión de la plataforma Qcaid destinada a que los traders particulares puedan diseñar algoritmos para luego alquilarlos en el mercado de iSystems.
-¿Y se puede competir desde Galicia en un universo tan competitivo como el de los mercados financieros?
-Sin ninguna duda. Aunque la localización puede ser todavía una ventaja competitiva, en un mundo interconectado como el nuestro, simplemente hace falta reunir el talento necesario y abrirse al mundo para competir en este y en otros mercados. Y a veces operar desde una ciudad pequeña, como Pontevedra, tiene una serie de ventajas, como la mayor facilidad para captar y retener el talento.
-La falta de profesionales cualificados es una demanda recurrente de las tecnológicas, ¿comparte esta visión?
-El problema de las tecnológicas es que demandan profesionales altamente especializados y, a menudo, la especialización ha de hacerse dentro de la propia empresa. En nuestro caso, siempre buscamos colaborar estrechamente con la universidad e, incluso, con los centros de formación profesional para captar el talento joven y ofrecer la posibilidad a los recién graduados de comenzar su carrera en Qbitia. Lo que hacemos es ofrecerles formación desde el primer día, lo que seguramente ha contribuido a que la mayoría de nuestros empleados lleven muchos años con nosotros.