02 ene 2019 . Actualizado a las 05:00 h.
La primera batalla de porteros se convirtió en una fiesta en el campo del Marcón Atlético, que reunió a 34 jugadores de esta posición para competir en cuatro categorías repartidas en alevín infantil, cadetes, juveniles y sénior. Disputaron una batalla en la que el ganador se llevaba un par de guantes de la nueva marca pontevedresa Arch Keeper, creada por el portero del Marcón y su entrenador. Durante más de cinco horas, O Carrasco se convirtió en una guerra cruzada para reivindicar el papel de los guardametas y la necesidad de realizar más eventos deportivos donde ellos sean los protagonistas.