El conjunto pucelano asumió las riendas ante un equipo sin acierto en ataque y defensa
01 dic 2018 . Actualizado a las 23:15 h.No tuvo oportunidad el Teucro de demostrar que podía remontar el partido ante el conjunto pucelano. Motivados por dos victorias consecutivas recibieron en el Municipal a un Valladolid bien armado que se lució más de lo habitual por las deficiencias de los azules. Acostumbrados a soportar el equipo sobre la figura de Cutura, se mostraron como un equipo débil. El jugador serbio no tuvo la tarde, pero tampoco el juego defensivo de José Manuel Rial. Los balones no entraban en los lanzamientos exteriores y apenas llegaban con peligro por los extremos.
El Teucro llegó al minuto cinco de juego con un empate a 2-2, la única igualdad que hubo en todo el partido. Desde ese momento, el equipo se rompió. Y lo hizo demasiado pronto para poder reconducir la situación. Ni en los contraataque conseguía equilibrar el infortunio. El poste se convirtió en un aliado rival, con 3-5 en el minuto diez, los embistes contra la portería dejaban más golpes contra el palo que aciertos en la meta de César Pérez Verdejo, un salvavidas para los vallisoletanos. También Santana, que jugó el partido completó, contribuyó a que la sangría azul fuese menos dolorosa. Viendo que la situación solo iba a peor y con 3-7 en el marcador, Luis Montes pidió el primer tiempo muerto del partido para intentar cerrar los huecos que abría la defensa del Teucro.
El técnico local optó por el doble cambio defensa ataque para buscar cerrar la herida que se abría, pero no funcionaba ante un Valladolid muy rápido, que cerraba muchas jugadas con el lanzamiento del extremo derecho. Manuel García convertía en gol casi todo lo que le llegaba.
Un penalti sobre Domingos acaba con Cutura errando y marcando el rebote, pero ni siquiera esas oportunidades enchufaban a los locales en el partido. El triángulo de ataque pivotado por el serbio, Moyano y Natan Suárez, no funcionó. La brecha en el marcador era de seis puntos y así se llegaría al descanso. Con un 10-16 en el electrónico, a los locales se le hacía cuesta arriba el partido. Un disparo de Natán con la portería vacía se queda sobre la red, en lo que sería un claro ejemplo de la efectividad teucrista.
A la vuelta de vestuarios la distancia llegó a ampliarse a los siete puntos, pero una brillante segunda parte de Santana evitó que se aumentase. La pena es que el equipo no lo acompañó en la pista y el esfuerzo del canario se quedó desdibujado. Si acaso la entrada de Juan Quintás puso algo de color en el encuentro y Cutura parecía coger el ritmo, pero ya era demasiado tarde. Los hermanos Camino de la Cal, el ex teucrista Víctor Rodríguez y García Pascual mandaron en Pontevedra. Al Teucro solo le quedó resignarse y, aunque en el minuto 12 de la segunda parte recortó a cinco la diferencia, pronto fijo los seis goles como la brecha estándar.
Ahora tendrán que recomponerse para viajar a la capital catalana donde se medirán este martes ante el Barcelona. No cabe duda que todos los partidos hay que jugarlos, pero el Palau dicta sentencia siempre antes de haber juicio. El próximo sábado, los azules tendrán la oportunidad de devolver la ilusión a su afición en el derbi contra el Frigoríficos Morrazo. Una victoria en el derbi contribuiría a limpiar la pobre imagen del Municipal.
?Santana, Mosquera (2), Rial (1), Fischer, Davor Cutura (6), Natan Suárez (2) e Iván Fernández -equipo titular- Lloria (ps), Quintas (4), Gehrhardt (2), Dani Hernández (2), Samu Gómez (1), Sergio Pérez (2), Moyano (2) y Pereiro (1)
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César Pérez, Dani Pérez (4), Víctor Rodríguez (3), Abel Serdio (4), Adrián Fernández (3), Roberto Pérez (1) y Pascual (4) -equipo titular- Calle (ps), Héctor González (4), Diego Camino (2), Nico López, Turrado (1), Rubén Rio (2), Miguel Camino (3) y Mouriño
Parciales cada cinco minutos: 2-2, 3-5, 5-10, 6-12, 8-14, 10-16 (descanso); 11-18, 14-20, 16-23, 19-25, 21-29 y 25-31 (final).
Árbitos: Ausas Busquets y Florenza Virgili (colegio catalán). Excluyeron a Mosquera y Dani Hernández por parte del Teucro, y a Adrián Fernández (2), Héctor González y Rubén Rio por parte del Atlético Valladolid
Incidencias: Unos 1.100 espectadores en el Municipal