Segunda B La baja de Arruabarrena le dio la oportunidad de tener minutos y lleva tres goles en tres partidos consecutivos como titular en el Pontevedra
27 nov 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Javi Pazos está en racha. Tres partidos consecutivos como titular y tres goles en la mochila del Pontevedra, al que suma uno más en la cuarta jornada. En solo tres partidos ha igualado al hasta ahora máximo goleador de los granates, Mikel Arruabarrena. El destino del delantero vasco está ligado al del pontevedrés. Desde que se lesionó hace casi un mes, Javi ha ocupado su lugar en la ofensiva granate y ha demostrado la intención con la que fichó por el club de sus ojos. Sin embargo, la idea con la que llegó en agosto tiene pocas similitudes con la realidad de estas primeras catorce jornadas. Él no puede ser más claro. «Si no llega a ser por la lesión de Mikel no hubiese tenido tantos minutos, ya se estaba viendo. Tengo una sensación agridulce, no me puedo alegrar de la lesión de un compañero y menos de Mikel, que dentro del campo nos entendemos muy bien y nos ayudamos el uno al otro», indica al terminar la sesión de ayer en el campo de Cerponzóns.
Todavía recuperándose del esfuerzo físico que supuso jugar en un campo embarrado, Javi Pazos habla ahora desde la confianza que dan las victorias, pero sobre todo, la que regala los goles. «Estaba en un momento que me estaba costando, no estaba jugando mucho y me fastidia no hacerlo, además se me nota mucho jugando y entrenando», indica el delantero granate. Llegó como pichichi de Tercera y máximo goleador del Arousa en el mercado de verano después de frustrarse su traspaso en el de invierno. Venía para devolver a su antiguo club la gloria que había tenido en el conjunto vilagarciano, pero los primeros partidos rompieron su sueño con demasiados minutos en el banquillo. «Se cambió mucho la visión que tengo ahora de la que tenía cuando llegué, no estaban fichando a casi nadie y Mikel llegó casi en el último minuto. Empecé jugando el primer partido y luego ya no», dice con cierta nostalgia. Ahora ya no quiere pensar en eso. Su única meta es seguir teniendo minutos y demostrar que lo que hizo contra el Fabril, Sanse y Coruxo puede seguir haciéndolo.
«Ahora toca seguir demostrándolo, estoy con confianza y eso solo llega con minutos», comenta Javi Pazos, que no quiere apearse de la titularidad. Aunque están a expensas de lo que decida el míster, recalca que se siente muy cómodo con Mikel en el campo: «En Fuenlabrada jugamos los dos y ganamos 2-0, este domingo me sentí muy cómodo jugando solo en punta, pero si estoy con Mikel arriba y yo de media punta también estoy muy bien, con esos balones que él los baja y yo los veo de cara».
Javi Pazos marcó un gol por partido en los últimos tres encuentros, pero esa euforia la baja con los errores. Tras el entrenamiento de ayer aún lamentaba los errores de los balones no marcados. «Tuve una muy clara, que no me lo esperaba, cuando el taconazo de Romay. Me comí la cabeza todo el partido, si no meto después, me lo hubiese comido toda la semana», sentencia el delantero.